martes, 30 de noviembre de 2010

Cinco cuestiones desatadas por WikiLeaks



 La revista Newsweek publica hoy en su portal de internet el siguiente artículo.

1. ¿Qué fue lo que intentó esta vez WikiLeaks?

Julian Assange, el ex hacker de cómputo australiano que fundó WikiLeaks en 2006, dice que la misión del grupo es "proporcionar noticias importantes e información al público". El sitio ha presentado otras dos grandes tandas de material este año, incluyendo los 90 mil documentos de Estados Unidos publicados acerca de la guerra en Afganistán y los 400 mil reportes clasificados sobre Irak.

Además, un video que muestra a un helicóptero norteamericano Apache disparando sobre civiles en Bagdad. Y ahora esto.

Pero mientras que los casos anteriores revelaron estimaciones desconocidas sobre la cuota de civiles muertos en Irán y documentó asesinatos flagrantes, esta vez el objetivo es menos claro. En muchos casos la información es más embarazosa que clarificadora.

Si el punto era crear una turbulencia para el servicio exterior estadounidense, entonces la misión fue un éxito. Pero si el objetivo era incrementar la transparencia, Assange y WikiLeaks pueden conseguir lo opuesto.

2. ¿Por qué no hay más revelaciones escandalosas?

Cuando sea completamente presentado, este diluvio de documentos puede ofrecer un chispeante tesoro de información confidencial...o tal vez no.

Si las más grandes bofetadas en 10 años de cables diplomáticos clasificados son que el Primer Ministro ruso Vladimir Putin está muy unido con el Primer Ministro italiano, Silvio Berlusconi; que Washington está preocupado por el material nuclear en Paquistán; que los sauditas no están entusiasmados por el hecho de que Irán consiga tener una bomba; y que la secretaria de Estado, Hillary Clinton quiera que sus diplomáticos en Naciones Unidas reunan pruebas de inteligencia, entonces la Casa Blanca puede eventualmente permitirseun respiro de alivio.

Por supuesto que el diablo está en los detalles y las capitales alrededor del mundo están ahora estudiando minuciosamente los cientos de miles de documentos para encontrar alguna ventaja en sus situaciones locales, como las noticias de que durante la guerra de 2006 Irán estaba utilizando ambulancias para contrabandear armas dentro de Líbano.

3. ¿De quién es esta falta?

Los senadores ya han tomado el asunto para interponer una acción judicial contra los fundadores de WikiLeaks, pero muy pocas conversaciones han apuntado hacia la falla masiva en el sistema de seguridad
como el corazón de estas filtraciones, la mayoría de las cuales provienen de la red de seguridad del Pentágono-Departamento de Estado, conocida como Siprnet, utilizada para el intercambio de información clasificada (desde el 11/9 la red ha sido puesta a punto y hecha más accesible para facilitar compartir información de inteligencia).

¿Pero han mejorado los protocolos de seguridad de la red desde que a principios del año cuando WikiLeaks presentó el primer golpe? ¿Quién es el responsable en última instancia de asegurar esta masiva cantidad de material en primer lugar? La lógica dictaría que la operación de inteligencia y el sistema de  información tecnológica dentro del Estado y el Pentágono están ahora sometidos a revisión.

Pero en las próximas semanas cúantos exámenes y culpabilidades de este masivo cúmulo de organizaciones federales se volverán contra ellas mismas y revelarán exactamente cuán seriamente están tomando esta violación.

4. ¿Qué es lo sigue para Assange y WikiLeaks?

Desde el punto de vista de Australia creemos que existen potencialmente un número de leyes criminales que pudieron haber sido violadas, dijo el lunes el abogado general de Australia, Robert McClelland. En Estados Unidos el representante estadounidense Peter King va más lejos al pedir a la administración Obama etiquetar a WikiLeaks como una organización terrorista extranjera.

Actualmente Assange enfrenta una orden judicial de arresto en Suecia donde es sospechoso en un caso de estupro. Hoy el está apoyado sobre un equipo de nueve miembros que manejan WikiLeaks. Sólo como encabezados empezaron a zumbar con las revelaciones del domingo ciberataques al sitio de WikiLeaks. Ahora el tiroteo de todos es por el. ¿quién lo alcanzará primero?

5. ¿Son los documentos una peligrosa distracción?

The New York Times, The Guardian, Der Spiegel, El País y Le Monde tuvieron acceso anticipado al cúmulo de archivos y presentarán sus extensos reportes y análisis en los próximos días. Pero hay preguntas acerca de si estas revelaciones valen la cantidad de tinta que ha corrido acerca de ellas. 

Ciertamente que serán de gran utilidad para los historiadores, ¿pero son los interminables debates y el tiempo consumido y los esfuerzos de los diplomáticos estadounidenses para eludir las espinosas conversaciones en las capitales extranjeras una necesaria distracción de cosas más importantes como conseguir finalizar las negociaciones sobre el nuevo tratado START? ¿o dominar las tensiones sobre la península de Corea que han provocado volver a poner la atención en Beijing?

Los encabezados son una maquinaria, pero ¿estamos nosotros en las noticias de última hora o sólo chismeando acerca del libio Muammar Kaddafi y su pechugona enfermera ucraniana?

lunes, 29 de noviembre de 2010

WikiLeaks, otra vez


 Los más de 250 mil documentos dados a conocer a cinco grupos de medios por el portal de revelaciones WikiLeaks, proporciona una franca y al mismo tiempo crítica visión de los líderes extranjeros, así como información sensible aacerca del terrorismo y la proliferación de campos nucleares, porporcionada por diplomáticos estadounidenses, de acuerdo con The New York Times.

La Casa Blanca condenó la presentación hecha por WikiLeaks y dijo que las revelaciones podrían poner en peligro a sus informantes en el extranjero. Entre las revelaciones entregadas, además del New York Times, al periódico británico The Guardian, así como al francés Le Monde, al español El País y a la revista semanal alemana Der Spiegel, se da a conocer que el rey saudita Abdullah ha exhortado en varias ocasiones a los Estados Unidos para que ataque a Irán, como una manera de poner fin al programa nuclear de ese país.

"Corten la cabeza de la serpiente", dijo el embajador saudí Adel Al-Jubeir, citando los dichos del rey, durante una reunión con el general David Petraeus, en abril de 2008.

Los documentos filtrados, los cuales incluyen comunicaciones de 2007 y posteriores, también revelan que el politburó chino dirigió una intromisión en los sistemas de cómputo de Google, como parte de una amplia y coordinada campaña de sabotaje a cargo de operadores gubernamentales chinos, expertos privados en seguridad y bandidos de Internet, reportó el Times.

Como describió el semanario alemán Der Spiegel, los cables contienen ácidos y duros comentarios, como la descripción que hacen los diplomáticos estadounidenses de la canciller alemana Angela Merker, a la que describen como alguien que "evita riesgos y casi nunca creativa".

Otro documento descrito por el New York Times cita un cable del embajador estadounidense en que plantea la posibilidad de que el líder libio Muammar Gaddafi, pueda tener una relación amorosa con su enfermera ucraniana, quien es descrita como una rubia voluptuosa.

El diario dijo que muchos de los cables nombran fuentes diplomáticas confidenciales, desde abogados ectranjeros y oficiales militares hasta activistas de derechos humanos y periodistas, en la mayoría de los casos con una advertencia: Protegido o estrictamente protegido.

Comentarios como la descripción del presidente ruso Dmitri Medveded como Robin y del primer ministro Vladimir Putin, como Batman, seguramente avergonzarán a la administración Obama y complicarán su diplomacia.

La Casa Blanca dijo que la difusión de los documentos podría poner en peligro la vida de gente que vive bajo "regímenes opresivos" e "impactará profundamente" los intereses de la política exterior estadounidense, de sus aliados y socios alrededor del mundo.

"Para ser claros, tales revelaciones ponen en riesgo a nuestros diplomáticos, al personal de inteligencia y a las personas que de todas partes del mundo vienen a Estados Unidos por asistencia para promover la democracia y la apertura de sus gobiernos", dijo el portavoz de la Casa Blanca Robert Gibbs

"Al robar y difundir documentos clasificados WikiLeaks ha puesto en riesgo no sólo la causa de los derechos humanos, sino también las vidas y el trabajo de estos individuos", dijo.

Analistas de seguridad concuerdan en que la presentación de los documentos fue un severo golpe a la diplomacia norteamericana, debilita la confidencialidad que es vital para que líderes extranjeros y activistas hablen francamente con oficiales estadounidenses.

"Esto es devastador" dijo Roger Cressey, socio de una consultoría y ex oficial de seguridad informática, en un comentario vía correo electrónico.

El gobierno estadounidense, el cual fue informado por adelantado del contenido de los cables difundidos contactó a los gobernantes de Rusia, Europa y Medio Oriente para tratar de limitar los daños. La Casa Blanca también advirtió a los lectores que los hechos reportados en los documentos son con frecuencia incompletos y no necesariamente reflejan o incluso dan forma a las decisiones políticas de Estados Unidos.

Emile Hokayen, miembro del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, dijo que la dramática revelación de que el rey saudí Abdullah aconsejó a Estados Unidos golpear a Irán, pudo haber sido exagerada para efectos diplomáticos.

"Es muy posible que los Estados del Golfo hayan adoptado en privado una muy agresiva retórica sólo para presionar sobre la urgencia de la cuestión", dijo Hokayem. "Pero personalmente dudo que haya intenciones de una guerra como tal".

Entre las revelaciones reportadas por The New York Times figuran:

--Sospechas de que Irán ha obtenido de Corea del Norte sofisticados misiles capaces de golpear a Europa occidental, y la preocupación de Estados Unidos de que Irán esté utilizando estos cohetes como piedra angular para construir misiles de largo alcance.

--Alegatos de que operadores chinos han violado computadores del gobierno norteamericano y de sus aliados occidentales, del Dalai Lama y de empresas americanas desde 2002.

--Pláticas entre Estados Unidos y oficiales sudcoreanos acerca de las posibilidades de una unificación de Corea, a partir de los problemas económicos del Norte y de una política de transición que conduzca a una implosión del estado.

--Los sudcoreanos consideran que incentivos comerciales a China ayudarían a salvar las preocupaciones de este país de  vivir juntoa una Corea unificada y aliada a Washington, de acuerdo con el embajador estadounidense en Seúl.

--Reportan que donadores sauditas continúan como jefes financieros de grupos de militantes sunis como Al Qaeda y del minúsculo Estado de Qatar en el Golfe Pérsico, un generoso anfitrión de los militares americanos durante años, que fue el peor en la región en los esfuerzos antiterroristas, de acuerdo con un cable del Departamento de Estado en diciembre último.

--Desde 2007 los Estados Unidos han montado un secreto y totalmente infructuoso esfuerzo por sacar uranio altamente enriquecido de un reactor de investigación de Pakistán, por el temos de que pueda ser desviado para usarse en un ilegal artefacto nuclear.

Fuente: Reuter (traducción del autor)

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Hipotecando el futuro



He aquí un libro para el debate.

En esta hora de conmemoraciones centenarias y bicentenarias, cuando lo que está a faltar es una auténtica discusión sobre el país que podemos o queremos ser, México 2010. Hipotecando el futuro (Taurus) es un texto que traza algunas de las coordenadas en que puede inscribirse esa urgente reflexión.

Además de aportar ideas para lo que podría denominarse un proyecto de país, aventura algunos atisbos de lo que ocurriría en el lapso de poco más de una generación (25 años), ya sea que se actúe en un sentido (liberar al país de los intereses privados de toda laya que lo sujetan) o en otro (favorecer la subordinación a esos mismos intereses).

Cada uno de los siete ensayos que conforman el libro --escritos por Nicolás Alvarado, Gerardo Esquivel, Silvia E. Giorguli, Fausto Hernández Trillo, Alejandro Moreno, Érika Ruiz Sandoval (editora), Pedro Salazar Ugarte y Jesús Silva Herzog-Márquez-- puede ser leído como la pieza de un rompecabezas que, armado, muestra a un país que requiere ser rescatado.

El empleo aquí del término "rescate" es menos una licencia retórica que una necesidad real. Transcurrida la primera década del siglo XXI México se presenta a los ojos del observador como un país secuestrado por un entramado de intereses que representan a grupos de poder empresarial, financiero, mediático y hasta delictivo.

Ya desde el anterior libro de la serie, México 2010. El juicio del siglo, María Amparo Casar hacía notar que
El espacio público en Mëxico sigue cercado por el poder de grupos que sin ninguna investidura, representación o delegación democrática tienen el poder para imponer o modificar decisiones que afectan el interés público. Muchos de esos poderes "transitaron la transición" intocados e intocables (p. 55).
En Hipotecando el futuro, Jesús Silva Herzog-Márquez  atribuye a esa circunstancia el hecho de que vivamos lo que llama una democracia capturada.
Las estructuras corporativas --dice-- son imponentes para bloquear cualquier cambio que vulnere sus intereses; los grandes conglomerados empresariales imponen condiciones a la clase política; los poderes mediáticos ejercen un soberbio reinado de intimidación (p. 35).
 Lo que se describe en esas citas es la respuesta a las inquietudes ciudadanas básicas: ¿por qué si ya somos democráticos no mejora nuestra economía? ¿por qué nuestros representantes populares en el Congreso o nuestro presidente no responden ni gobiernan conforme a los intereses de las mayorías?

De nuevo Herzog-Márquez apunta la respuesta a ese desencuentro:
Partidos, dirigentes, asambleas legislativas, organizaciones civiles rebasadas cotidianamente por poderosos intereses económicos que logran imponer su fuerza sin encontrar resistencia. La clase política aparece de esta manera como brazo ejecutor de un manojo de intereses económicos...Tras la mantilla democrática vivimos un secuestro (pp. 36-37).
 La constatación de este fenómeno se convierte en el hilo conductor de Hipotecando el futuro, con su respectivo correlato: la falta de un proyecto de nación, de una agenda compartida, necesaria y urgente para salvar la joven democracia mexicana.

Así, en "El rompecabezas y el modelo:claves para una segunda transición mexicana", Pedro Salazar Ugarte se queja de que su idea de pugnar por una sociedad de derecho, una democracia constitucional sea un "proyecto sin promotores". Y cómo habría de tenerlos en un estado de cosas como el imperante, en el que más que una segunda transición lo que se requiere es una segunda Independencia.

Al respecto Silva Herzog adelanta una intuición: ¿Y si Carlos Marx tenía razón? ¿Y si la democracia liberal es, en realidad, la pantalla de otro imperio: el señorío de los intereses económicos? (p. 36).

Así planteada, la cuestión nos coloca de tajo en la gran falacia de la democracia mexicana: que si bien respondió a necesidades internas, el verdadero catalizador fue la ofensiva neoliberal contra el llamado Estado benefactor tras el fin de la Guerra Fría.

Ofensiva que, como bien observa Érika Ruiz Sandoval ("México y sus relaciones internacionales: ¿está desnudo el emperador?") México fue uno de los primeros en acatar mediante un seguimiento vertiginoso y sin reservas del modelo económico después conocido como Consenso de Washington.

La transición mexicana a la democracia fue una impostura. Llegamos a ella --en realidad sólo a la alternancia-- porque el anterior régimen de partido único no favorecía las nuevas condiciones requeridas para la reproducción del capital.

A ese capitalismo que requería de fronteras abiertas (la narrativa de la globalización) no le eran funcionales regímenes autoritarios o autocráticos. Véase al efecto la coincidencia histórica de las reformas orientadas al mercado con la ola democrática que se extendió por todo el mundo.

Salazar Ugarte, en el ensayo citado parece confirmar la cuestión: "El solo hecho de que nuestra democracia se haya edificado de la mano del modelo económico neoliberal es, en sí mismo, una falla de origen que obstaculiza atender la agenda pendiente de seguridad y justicia" (P. 120).

En efecto, porque se trataba sólo de ensanchar las posibilidades de reproducción del capital y de los negocios consustanciales al mismo y no tanto de desmantelar el diseño institucional que permite en México hacer negocios rentabilísimos en favor de los intereses extranjeros y sus representantes locales, pero en detrimento del país.

Un diseño institucional que funciona mediante monopolios tolerados, privilegios, concesiones ventajosas, tarifas preferenciales, control de los trabajadores, el cabildeo, subsidios y exenciones fiscales y mediante la captura de organismos reguladores (IFE, CFC, Cofetel), todo lo cual fue caracterizado por el premio nobel en ciencias económicas 2000, James J. Heckman, como un "capitalismo de amigos", en el que dominan los grupos de interés.

Lo que los autores de México 2010. Hipotecando el futuro no parecen advertir es que la captura de la democracia mexicana incluye la captura de instituciones como la presidencia de la República. Es decir, no es que poderes como la delincuencia organizada, el narcotráfico, las empresas trasnacionales o los medios de comunicación desafíen la capacidad del gobierno para asegurar los derechos de los ciudadanos.

Es muchas veces desde ese gobierno secuestrado desde donde se conculcan esos derechos. De ahí que la vía para recomponer el país pase por el rescate de sus instituciones.

Sólo así será viable reactivar la competitividad de la economía a partir de una reforma radical del sistema de impartición de justicia, como proponen Gerardo Esquivel y Fausto Hernández Trillo. O encaminarnos a una segunda transición hacia una democracia constitucional, en la que se combatan los rezagos sociales mediante la seguridad y la justicia, como quiere Pedro Salazar Ugarte; o emprender la transformación del sistema educativo que propugna Nicolás Alvarado; o, en fin, insertarnos productivamente en la nueva configuración geopolítica del mundo que está en marcha, como lo muestra Érika Ruiz Sandoval.

Así, la búsqueda del ansiado proyecto de país y su nueva narrativa no será viable mientras no se lo libere, primero, de la sujeción a los intereses privados. Mientras no se emprenda esa tarea ninguno de los escenarios hacia los que podría avanzar el país planteados por los autores será posible.

Ese es el tamaño del reto para no vivir Hipotecando el futuro.

Ficha Técnica

Colección: Historia
Género:      Ensayo
Formato:   15 x 24
Encuadernación: Rústica
Páginas:     241
Precio:       279.00