martes, 17 de enero de 2017

Crisis mundial de confianza

La confianza está en crisis alrededor del mundo, asienta el 2017 Edelman Trust Barometer. La confianza de la población general sobre cuatro instituciones clave --negocios, medios de comunicación, gobierno y ONG's-- ha declinado notoriamente, un fenómeno no reportado desde que Edelman empezó a medir la confianza entre estos segmentos, en 2012.

Con la caída de la confianza, la mayoría de los entrevistados han dejado de creer totalmente en que el sistema esté trabajando por ellos. En este clima las preocupaciones de las personas acerca del trabajo, amenazado por temas como la globalización y la automatización, se han convertido de nuevo en temores, que incitan a la adopción de acciones populistas como las que ahora se aplican en varias democracias occidentales.

Para reconstruir la confianza y restaurar la fe en el sistema, las instituciones deben dar pasos fuera de sus tradicionales roles y trabajar hacia un nuevo y más integrado modelo de operaciones que ponga a la gente, y los temores que sienten, en el centro de lo que ellas hacen.

El reporte asienta que la confianza en los medios cayó a 43 por ciento y es la más baja de todos los tiempos en 17 países. En tanto, los niveles de confianza en el gobierno (41%) cayó en 14 marcadores y es la institución menos confiable en la mitad de los 28 países encuestados.

La credibilidad en líderes también está en riesgo: la credibilidad de los líderes empresariales se redujo 12 puntos globalmente, para quedar en un reducido 37% también el más bajo de todos los tiempos. Mientras, la credibilidad de los líderes gubernamentales (29%) permanece como la menos favorecida.
The Trust Barometer, encontró que 53% de los entrevistados cree que en términos generales el sistema les ha fallado, que es injusto y que ofrece pocas esperanzas para el futuro.

Sólo 15% cree que el sistema está funcionando y únicamente un tercio está indeciso. Incluso las élites carecen de fe en el sistema: 48% del nivel de más altos ingresos, 49% de quienes tienen educación escolar, y la mayoría de los mejor informados (51%), dicen que el sistema ha fallado.

Las implicaciones de la crisis global de confianza son profundas y de amplio rango, dijo Richard Edelman, presidente y CEO de la firma. Empezó con la gran recesión de 2008 y como segunda y tercera olas de un tsunami, la globalización y el cambio tecnológico han debilitado aún más la confianza global de la gente en las instituciones. Las consecuencias son un virulento populismo y nacionalismo con el que las masas populares han tomado el control, más allá de las élites, añadió.

Otro hallazgo del estudio es que la mitad de los países encuestados han perdido la fe en el sistema, y estos son encabezados por Francia e Italia (72%), seguidos por México, Sudáfrica y España (67%).

La encuesta de Edelman consistió en entrevistas on line de 25 minutos realizadas entre el 13 de octubre y el 16 de noviembre de 2016, entre unos 33 mil entrevistados, entre ellos 1,150 personas de la población en general mayores de 18 años; 500 personas publicamente informadas de EUA y China, así como 200 de cada uno del resto de los 28 países encuestados.

Una persona públicamente informada es definida por la encuesta como alguien de entre 25 y 64 años con ingreso familiar en el decil más alto.

viernes, 2 de diciembre de 2016

Trump: capitalismo de amigos.

El anuncio hecho por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, según el cual llegó a un arreglo con United Technologies, propietaria de la empresa Carrier, para mantener en ese país los mil empleos que planeaba llevar a México, ha generado preocupación acerca del nuevo tipo de capitalismo que impulsa el próximo huésped de la Oficina Oval.

Entrevistado por el NPR Staff, Tyler Cowen, profesor de Economía de la George Mason University, dijo estar preocupado por el capitalismo de amigos que ese acuerdo anuncia para los próximos años. Dijo que en un esquema semejante las compañías que estén bien con el presidente recibirán recompensas. "Ello anuncia un ambiente en el que las decisiones de negocios dependerán de qué tanto complaces al Presidente".

Dijo que el acuerdo entre Trump y la empresa de aire acondicionado Carrier es completamente opaco, y la noción de cada gran empresa americana deberá negociar de persona a persona con el Presidente a través de twitter, hará que se politicen todas las decisiones de negocios.

Según NPR no se sabe exactamente lo que Carrier consiguió con ese acuerdo, pero se cree que accedieron porque temen perder los contratos que tienen con el gobierno de Estados Unidos, lo cual crea la imagen de un presidente que amenaza o recompensa a las compañías dependiendo de si le dan o no buenas noticias que presentar a la prensa.

En un texto publicado por The Washington Post, el senador Bernie Sanders, el demócrata que disputó a Hillary Clinton la candidatura a la presidencia, dijo que el acuerdo Trump-Carrier mostró cómo las compañías pueden derrotar al próximo Presidente.

Sanders sugirió además que a cambio del acuerdo, Trump dará a la compañía los beneficios fiscales que ésta había estado buscando. "En esencia, United technologies tomó a trump como rehén y ganó", afirma el senador demócrata.

Añadió que de paso, el presidente electo a puesto en riesgo los puestos de trabajo que ya habían sido salvados porque ha enviado la señal de cada corporación americana que amenace con crear empleos en el extranjero, podrá recibir beneficios fiscales e incentivos. Incluso corporaciones que no estaban pensando crear empleos en el extranjero podrán estar reconsiderando su postura y amenazar con hacerlo.

El senador demócrata afirma que quienes pagarán los altos costos por los recortes impositivos que se ofrezcan a los hombres más ricos de negocios en América será la clase trabajadora.




 

martes, 25 de octubre de 2016

La Inquisición católica y la cremación.



El Santo Oficio nos recuerda de cuando en cuando que para la Iglesia seguimos en el siglo XVI. Llamado ahora Congregación para la Doctrina de la Fe, nos receta cada tanto interpretaciones sobre lo que juzga desviaciones en la práctica o interpretación del corpus católico.

En un documento titulado  Ad resurgendum cum Christo, aprobado por el papa Francisco, prohíbe esparcir o conservar en casa las cenizas de los difuntos cremados. En realidad la renuencia de la Iglesia es contra la cremación misma, una práctica que, dice, se ha extendido, pero que es contraria a la fe de la Iglesia, según la cual, en dichos del prefecto de la congregación, el cardenal alemán Gerhard Mueller, "los muertos no son propiedad de los familiares, son hijos de Dios y esperan en un campo santo su resurrección".

La jerarquía católica mira con recelo que las cenizas las conserven los familiares porque, dice, produce riesgos como la posibilidad del olvido que pueden sobrevenir sobre todo pasada la primera generación, así como prácticas inconvenientes o supersticiosas.

Recomienda en cambio, mantener las cenizas en un lugar sagrado como un cementerio, en una iglesia o en un área especialmente dedicada para tal fin por la autoridad eclesiástica competente. Si bien la Iglesia reconoce que no existen razones doctrinales para prohibir la cremación, pues no impide a la ominipotencia divina resucitar el cuerpo, el secretario de la Comisión Teológica Internacional, Serge Thomas Bonino, la calificó como "algo brutal" y que además no permite a las personas cercanas acostumbrarse a la falta de un ser querido.

Como en tantos otros temas, en este caso la Iglesia se coloca contra las prácticas seculares, fiel a su pulsión de controlar, a través del Santo Oficio, aunque ahora se denomine de otra forma, la vida de las personas. No tendrán eco.


martes, 9 de febrero de 2016

Murakami y Rulfo


Tardío lector de Haruki Murakami --apenas concluí los libros 1 y 2 de esa monumental novela que es 1Q84-- encuentro en su universo narrativo paralelismos con nuestro Juan Rulfo. Tanto, que hasta me parece que este autor japonés ya candidato al Nobel, hace en la mencionada obra un guiño o, si se quiere, un homenaje al Pedro Páramo del jaliscience.

Hay, en la obra rulfiana, una frase que algún crítico ha juzgado extraña, pero cargada de simbolismo: cuando el fantasmal arriero que encuentra Juan Preciado en su camino a Comala le dice que él también es hijo de Pedro Páramo, Rulfo escribe enseguida: "Una bandada de cuervos pasó cruzando el cielo vacío, haciendo cuar, cuar, cuar".

En la página 680 de 1Q84 (edición Tusquets 2015), uno de los protagonistas de la obra visita a su padre en la clínica en que está recluido con la memoria extraviada. Tras despedirse el personaje de su progenitor, y sin que tampoco viniera mucho al caso, Murakami introduce esta frase en el relato: "Una bandada de cuervos atravesó el cielo graznando".

Se trata, me parece, de una clarísima alusión a Rulfo, en una novela que, lo mismo que la del mexicano, está construida en un estilo de gran lirismo y en la que el mundo y su realidad están trastocados por presencias intrusivas y avasallantes. De modo que la novela del autor japonés no solo tiene ecos orwellianos, sino también rulfianos, como lo muestra esa frase que he referido, que es similar, matizada por un fraseo apenas diferente.

lunes, 8 de febrero de 2016

Fallas en edición de Los de abajo


La atractiva edición centenaria de la novela Los de abajo, de Mariano Azuela, que el Fondo de Cultura Económica (junto con la UAM y El Colegio Nacional), publicó en el amanecer de este 2016 en su colección Letras mexicanas, tiene dos errores inexcusables en una edición como esa.

En el estudio introductorio, Víctor Díaz Arciniega refiere que el general Julián Medina participó como villista en la Convención de Aguascalientes y llegó a gobernador interino de Jalisco. Añade que Friedrich Katz lo calificó como "uno de los rebeldes locales (de Jalisco) más influyentes". En este punto se omite, como no se hace en otros casos, incluir la referencia de en qué obra el investigador alemán incluyó ese juicio.

Hay que colegir que se trata de la monumental biografía que sobre el Centauro del Norte escribió Katz y que Editorial Era publicó en dos tomos en 1998.

La otra inexactitud está en la página 16. Escribe Díaz Arciniega: "Mariano Azuela padeció durante los trece meses de la presidencia de Madero --del 6 de noviembre de 1911 al 22 de febrero de 1913-- el denso ambiente de Lagos...". Solo que el periodo citado no es de 13 sino de 15 meses.

Lamentables desatenciones que opacan esta edición conmemorativa.

lunes, 4 de enero de 2016

La crisis del posdoctorado en EUA


Un artículo publicado este lunes en The Scientist Magazine por Muhammed Z. Ahmed, afirma que la carencia de trabajo está dejando a los posdoctorados sin un futuro dentro de la academia, en los Estados Unidos.

Tras señalar que quienes estudian posdoctorados tienen un papel crítico en la productividad de la investigación de cualquier país, el investigador de The Tropical Research and Educational Center, de la Universidad de Florida,  indica que Estados Unidos cuenta con una relativamente fuerte infraestructura posdoctoral y ofrece altos salarios y más beneficios que en la mayoría de los otros países. Sin embargo, asienta que el limitado crecimiento de los fondos federales para investigación, durante la última década, ha incrementado la dificultad de los posdoctorantes para encontrar trabajos permanentes.

El limitado financiamiento también ha creado un ambiente altamente competitivo para aquellos que encuentran posiciones como investigadores principales.En cambio, señala que en China los fondos para investigación y desarrollo se han incrementado cerca de 10 veces en el mismo periodo y el numero de posdoctorantes ha aumentado con ello, no obstante que los salarios y los beneficios se mantienen bajos.

De acuerdo con una encuesta reciente, la mayoría de los científicos chinos sienten que recibieron un insuficiente tutelaje durante su paso del doctorado al posdoctorado, y que no existe una infraestructura organizada para responder a los desafíos que los posdoctorados enfrentan. Si continuara la carencia de inversión en posdoctorados, tanto China como Estados Unidos podrían ver disminuida su reputación como poderosas casas de investigación, lo cual solo serviría para exacerbar el problema de los posdoctorados.

El autor comenta que junto con sus colegas encuestó recientemente a la comunidad de posdoctorados sobre la cantidad de fondos federales para investigación y desarrollo y acerca del número anual de publicaciones en ambos países.

Entre 1993 y 2012 China exhibió un excepcional crecimiento en las tres áreas: el número total de posdoctorantes nacionales e internacionales aumentó sustancialmente cada año; los fondos gubernamentales se incrementaron a una taza de aproximadamente 18.7 por ciento por año, resultando en un incremento de 2, 273 por ciento en los 20 años del periodo examinado. En tanto el número de publicaciones se cuadruplicó.

En Estados Unidos el número de posdoctorados no se incrementó, los fondos federales decrecieron aproximadamente 0.2 por ciento cada año, resultando un declive total de 4.7 por ciento entre 1993 y 2012, mientras que las publicaciones anuales han permanecido relativamente constantes.

El autor del texto comenta que sin duda estos tres factores --los posdoctorados, los fondos federales y las publicaciones-- están correlacionados. Hay una cruda diferencia entre la tendencia de crecimiento de China y la neutral y ligera tendencia descendente de Estados Unidos, lo cual plantea una interesante cuestión: ¿el incremento en los fondos para los posdoctorados podría estimular una mayor productividad científica en los EUA?

Una encuesta aplicada por la Harvard Medical School, mostró que 70-90 por ciento de los artículos publicados entre 1990 y 1999, seleccionados de los laboratorios de más alto perfil, incluidos 43 por ciento de artículos publicados en Science, tenían a un posdoctorante como primer autor. Esta tendencia, la cual continua en los EUA, indica que los posdoctorantes permanecen como uno de los grupos de investigación más productivos.

Una tendencia que notamos en nuestro reciente estudio --apunta Ahmed-- es el significativo movimiento de jóvenes investigadores de China hacia los Estados Unidos para su entrenamiento posdoctoral. La mitad de los actuales posdoctorantes en EUA son ciudadanos no estadounidenses con visas temporales. Solo 11 por ciento de los posdoctorantes chinos beneficiados continua su investigación como posdoctorante en instituciones chinas.Muchos apuntan a EUA.

El número de estudiantes chinos graduados en EUA creció más del triple entre 1987 y 2010. China es actualmente la más grande fuente de doctores en ciencia extranjeros graduados en EU. Los notoriamente bajos salarios en China están empujando a los talentosos jóvenes investigadores de ese país a buscar oportunidades de posdoctorados en el extranjero, y el extendido uso del Mandarían ha creado una barrera lingüística que con frecuencia impide a los doctorantes internacionales aceptar posiciones en China.

Por otra parte, los posdoctorantes internacionales son atraídos con frecuencia hacia EUA porque creen que les proporcionará mejores oportunidades de avanzar en sus carreras de investigación, que las que encontrarán en sus países de origen.

Sin embargo, los posdoctorantes están enfrentando en EUA una creciente incertidumbre en cuanto a conseguir empleos permanentes. Una reciente estimación mostró que solo alrededor de 15 por ciento de los doctorantes estadounidenses tienen trabajos permanentes, mientras que otra encuesta encontró que la taza de desempleo después de completar un posdoctorado creció más del doble, al pasar de cuatro por ciento en 2008 a 10 por ciento en 2012.

Como resultado de ello los posdoctorantes permanecen más tiempo en posiciones con bajos sueldos. Mientras que una típica posición posdoctoral suele durar uno o dos años, muchos jóvenes investigadores permanecen hoy en posiciones de ascenso durante tres o cinco años. Otros se han desencantado de la perspectiva de una vida en la academia y eligen aceptar posiciones en la industria o abandonan la investigación totalmente.

Para mantener su alto nivel en investigación, China y EUA deben promover cambios significativos. China debe destinar más fondos a incrementar el salario de los posdoctorantes y mejorar la calidad de su formación. EUA necesita un influjo de apoyo financiero y mantener los actuales estándares en la formación posdoctoral.

Los cambios, dice Ahmed, también deben ocurrir en el ámbito de las universidades. Las instituciones académicas deberían enseñar a los estudiantes acerca de la carrera académica, la investigación colaborativa, y administración de laboratorios; revisar los criterios de selección para el ingreso de estudiantes graduados, para asegurar que solo se enrolen los candidatos con los mejores talentos, y conducir encuestas para determinar qué tipo de estudiante tiende a actuar mejor en la industria o en la academia y rediseñar programas de graduación de acuerdo con esas características.



 

domingo, 30 de agosto de 2015

El nuevo pacto PRD-Peña




El PRD y sus usufructuarios, los llamados "chuchos", acaban de consumar una traición más a sus disminuidos electores y, de paso, corroboran la descomposición política de ese partido en camino de extinción, a no ser por la vida artificial que pueda insuflarle el propio gobierno mediante maniobras como la que acaba de producirse.

Sucede que Jesús Zambrano fue designado presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados para el primer año de la legislatura que inicia funciones este 1 de septiembre. La obsequiosidad oficial para con un partido como el PRD, impensable hace algunos años, tiene su origen en el temor gubernamental de que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), pudiera llegar a presidir ese órgano legislativo en 2017, el año previo a las elecciones presidenciales.

Un acuerdo cameral dicta que la presidencia de la mesa directiva se turnará entre los tres partidos mayoritarios. De acuerdo con cálculos gubernamentales, la fracción parlamentaria del lopezobradorismo podría incrementarse con nuevas defecciones de diputados perredistas y las incorporaciones de los diputados del Partido del Trabajo, una vez que se oficialice su pérdida del registro.

Esas circunstancias podrían hacer que en 2017, luego de que el PRI y el PAN hubieren presidido la mesa directiva de la Cámara, tuvieran que cederle la posición a la tercera fuerza que para entonces sería el partido de López Obrador. Al dejar que el PRD presida el primer año de la legislatura, se cierra el paso a esa posibilidad, pues se alegaría que el turno de la tercera fuerza ya fue otorgado.

Mediante esta maniobra, el PRD es utilizado de nuevo por el gobierno peñista, con el beneplácito de su cúpula chucha, para golpear y estorbar el avance de la izquierda, por cuya pretendida unidad no dejan de clamar los entreguistas y claudicantes miembros de Nueva Izquierda, a la que pertenecen el propio Zambrano, Jesús Ortega y Carlos Navarrete, entre otros.

La jugada cumple el doble propósito de estorbar el avance de Morena y fortalecer al perredismo, cuya menguante condición actual no le es útil al grupo en el poder, como factor de división y pulverización del voto de izquierda.

Hasta antes del sábado, Zambrano buscó ser designado coordinador de su fracción parlamentaria, cargo para el que enfrentaba una férrea oposición dentro de su partido. La maniobra gubernamental lo salvó de esa derrota, pero muestra con meridiana claridad lo que ya se sabía: que la pretendida reconversión de ese partido anunciada con la próxima sustitución de su Comité Ejecutivo Nacional, no es más que una simulación y que su verdadera transformación consiste en que se ha convertido en un partido satélite del gobierno y que su triste papel ahora es combatir todo aquello por lo que luchó cuando fue creado.


martes, 10 de marzo de 2015

La imposición de Medina Mora: los significados


La designación de Eduardo Medina Mora como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, mediante el mayoriteo de PRI-PAN-PVEM constituye una nueva confirmación de como el grupo hegemónico en el poder se pertrecha y se prepara para mantener su guerra de contrainsurgencia contra los ciudadanos, mediante la cooptación de todos los resquicios posibles.

Si se mira con atención, se verá que la imposición de Medina Mora, pese al rechazo generalizado, viene a certificar la muerte en México de la llamada separación de poderes y a acreditar la ofensiva gubernamental contra la sociedad. Considerada como un valor de las democracias occidentales, la tal división se vendió como un mecanismo de pesos y contrapesos que serviría para mantener el equilibrio del sistema, de modo que ninguno de los tres poderes formales incurriera en excesos que condujeran al colapso del contrato o consenso social.

La realidad es otra. La división de poderes tiene una razón de ser distinta de la que plantea el formalismo legal: su razón es proteger el sistema económico prevaleciente y asegurar que ningún poder por si solo sea capaz de modificar --si llegara a caer bajo el control opositor-- el modo de producción que permite el dominio económico y político de unos pocos sobre el resto del conglomerado social.

Con la asunción del primer compadre del país a un sitial en la Corte termina por cerrarse la pinza del control social, pues el otro extremo se configuró con el sometimiento del Congreso --el otro Poder-- vía la compra y/o negociación, según fuera necesario, de los partidos pretendidamente opositores (PAN-PRD), que así se sumaron a los satélites naturales: Nueva Alianza y PVEM, en aquel desfiguro político, pero económicamente redituable, llamado Pacto por México.

Dadas las batallas que con buen cálculo prevé el peñanietismo que habrá de seguir librando contra la sociedad mexicana que se opone al proyecto desnacionalizador y antipopular que encabeza, desde ahora se ha hecho del control político de los tres poderes de la Unión, con lo que formalmente mantiene arrinconado al pueblo y a cualquier intento por romper con esa hegemonía: desde el Congreso podrán seguir legislando para legitimar las rapaces relaciones sociales de producción, y desde una Corte mayoritariamente conservadora, ahora apuntalada con el ex procurador, podrán seguir desechando cuanto recurso de inconstitucionalidad se presente y, lo más importante, podrán seguir criminalizando la protesta social y avalando los fraudes electorales por venir.

Sin embargo, ese ominoso diseño no lo es todo, pues qué eficacia tendría una autocracia como la que ya con descaro se ha configurado en este país, si al control social vía el formalismo legal no añadiera la fuerza real de las armas: el uso legítimo de la violencia, que le llaman.

Y en efecto, la pretendida guerra contra el crimen organizado ha dado la coartada perfecta --ya desde el calderonismo-- para ir construyendo por todo el país nuevos cuarteles y destacando batallones para que llegado el caso actúen contra la propia población eventualmente insurrecta. Ese es el verdadero diseño.

Por eso las impugnaciones contra el ex embajador en el Reino Unido y en Estados Unidos nunca iban a ser oídas ni a prosperar, porque el designio de llevarlo a la Corte para apuntalar el proyecto hegemónico estuvo claro desde que Peña Nieto conformó la terna donde lo incluyó a él y a los otros dos magistrados que, siempre se supo, incluso ellos mismos, no eran mas que simples comparsas.

Así, con la partidocracia en un puño, los poderes cooptados, el ejército diseminado por todos los puntos del país para lo que pueda ofrecerse contra la población y las instituciones de procuración de justicia cedidas a uno de los poderes fácticos más determinantes en este país (el poder de las televisión), el peñanietismo está listo para mantenerse al mando y entregar buenas cuentas a los centros de poder trasnacional que lo impusieron.

Ante eso, todo el desgaste que pueda seguir sufriendo mediante las redes sociales no será sino anecdótico, mientras no se organice una insurrección cívica verdaderamente articulada. Porque está claro que estamos ya bien encaminados hacia una auténtica autocracia en la que la vía electoral está, como se verá en junio próximo, virtualmente cancelada.





 

martes, 4 de noviembre de 2014

Pacto por la sobrevivencia política


El Pacto nacional por la seguridad a que convocará Enrique Peña Nieto a gobiernos, partidos políticos y a las organizaciones civiles es, en realidad, un pacto por la sobrevivencia política del sistema y sus usufructuarios encaminado no a "garantizar la plena vigencia del Estado de Derecho", sino a la conservación del poder de esas élites y de las condiciones que hacen posible el diario saqueo de los recursos públicos, a costa de los ciudadanos.

El desbordamiento de una porción de la sociedad tras el eufemísticamente llamado caso Iguala (en realidad un crimen de Estado contra seis jóvenes estudiantes y la desaparición de otros 43 pertenecientes a la normal rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa), ha conducido a esa otra porción del crimen organizado conocida comúnmente como clase política, ha lanzarse un nuevo llamado a cerrar filas entre ellos, a reorganizarse mediante un pacto cosmético cuya difusión propagandística --esa sí-- esté dirigida al gran público para que éste aprecie los esfuerzos "serios" y "responsables" que esa élite empoderada hace para rescatar al país de la "descomposición" en que está naufragando.

En realidad quienes están en riesgo son esos grupos hegemónicos ante una reacción social que seguramente ya han calibrado como potencialmente peligrosa para el esquema de dominación política que les permite enriquecerse sin medida vía la corrupción, los negocios y las complicidades mutuas (incluido el regenteo del narcotráfico), esas que ahora  se dicen dispuestos a erradicar mediante el tal acuerdo nacional aderezado con calificativos que se pretenden rimbombantes y autolegitimadores como los de "acuerdo con visión de Estado y de largo plazo".

Se trata de una puesta en escena demasiado vista con el mismo deplorable reparto cuya actuación condujo precisamente a lo que ahora se pretende cambiar a punta de declaraciones y de aparentes actos de contricción. Un cambio para remover estructuras, levantar polvo, vender humo y hacer ruido mediático el tiempo suficiente que permita atemperar los ánimos inconformes, sofocar las rebeliones en ciernes y "fortalecer las instituciones", vale decir: para afinarlas de modo que pueda continuar funcionando mejor aceitada la misma maquinaria política delictiva.

Un auténtico pacto transformador tendría que empezar por una reducción inmediata de los sueldos de la alta burocracia enquistada en los tres órdenes de gobierno y en los tres poderes de la Unión, y de sus elevadas y desiguales prestaciones respecto del resto de la clase trabajadora del país; otro tanto debiera ocurrir con el financiamiento público a los partidos políticos, así como una revisión inmediata de las concesiones otorgadas para los grandes proyectos de infraestructura pública del sexenio incluidos el nuevo aeropuerto y el tren rápido México-Querétaro, asignado según eso a la única empresa que presentó una propuesta: un consorcio chino-mexicano, cuya parte nacional está en manos de empresarios cercanos al propio Peña Nieto y de Hipólito Gerard, cuñado de Carlos Salinas de Gortari, quien así se harán de un negocio de más de 50 mil millones de pesos.

Un pacto en serio tendría que desmantelar las estructuras del Estado organizadas para la corrupción, el saqueo y el control social de la población vía la colusión entre la clase política y el llamado crimen organizado, pero eso --se considera-- sería entregar las bases con las que la actual clase política mantiene  el control y el dominio que ejerce sobre la sociedad mexicana.

Una viñeta ilustra de manera involuntaria el carácter cosmético y falso del pacto a que convocará el peñanietismo a la sociedad mexicana: el anuncio fue formulado durante el acto en que se presentaron los reglamentos de la reforma energética, el acto por el que se ha entregado la riqueza del país a la depredación económica del extranjero y en cuyos negocios participará seguramente la clase política de izquierda y derecha que tramó esa entrega.

domingo, 22 de junio de 2014

Argentina, México y el capitalismo buitre


Por estos días resulta inevitable comparar el patriotismo y el valor de la presidenta argentina Cristina Fernández para defender los intereses de su país, con el entreguismo y la alevosía de Enrique Peña Nieto para traicionar y vender el suyo.

Puesta ante la tesitura de pagar a especuladores financieros a cambio de la ruina económica del país, Fernández de Kirchner busca una negociación justa, pues “no estoy dispuesta a rifar la patria…porque nuestros hijos y nietos no dependen de este gobierno, sino de que haya patria con soberanía, igualdad y posibilidades de crecimiento”.

Como se sabe, esta semana la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos emitió un fallo que obliga a Argentina a pagar al contado y en una sola exhibición unos mil 500 millones de dólares a los llamados fondos buitre.

Esta denominación carroñera se aviene bien con la naturaleza especultiva consustancial al capitalismo financierista que se ha enseñoreado en el mundo. Se trata de agencias que aprovechando las crisis económicas adquieren bonos de deuda de países en problemas –como Argentina en 2001—a precios bajísimos y mediante movimientos especulativos obtienen ganancias muy por encima de lo invertido.

La administradora NML compró en 2008 títulos vencidos de deuda argentina por 48 millones de dólares y ahora pretende cobrar 832 millones lo que equivale a una ganancia de mil 608 por ciento.

Ese es el modo –no la actividad productiva—en que los grandes capitales hacen negocio y obtienen ganancias fáciles en la era de la globalización. Un dato ilustra lo ilustra mejor: a fines de la década de 1990 se movían en los mercados financieros globales unos 25 billones de dólares al día, comparado con un comercio mundial de solo 10 mil millones de dólares diarios. Es decir, el comercio real (bienes y servicios producidos por trabajadores) fue de solo uno por ciento del comercio ficticio (movimientos financieros especulativos).

Por esa y otras vías (los Swaps) los fondos buitre han contribuido a la ruina de países como Grecia, España y Portugal que luego son sometidos a rigurosos programas de ajuste económico en detrimento de la población.

En el caso argentino el desembolso que se exige equivale a más de 50 por ciento de sus reservas lo que implicaría ingresar en una espiral de endeudamiento-pobreza-más endeudamiento con la consecuente reducción de programas sociales, desempleo, hambre y empobrecimiento generalizados.

Lo perverso del caso es que cuando el país austral renegoció su deuda para evitar incurrir en el impago, pues siempre reconoció su deuda, 92 por ciento de sus acreedores aceptaron el trato; los fondos buitre fueron los únicos que se negaron a ello.

El fallo de la Corte estadunidense empuja a un país como Argentina a caer contra su voluntad en el incumplimiento de pagos, pues se exige que antes que al resto de los acreedores primero se liquide la deuda con los fondos buitre antes del próximo 30 de junio. Incluso estos fondos podrían obtener órdenes de embargo sobre los fondos que Argentina transfiere a Nueva York para el pago a los acreedores que sí aceptaron reestructurar su deuda, lo que la colocaría en default técnico (cese de pagos).

La mandataria argentina recordó el viernes 20 de junio que su país ha descubierto la segunda reserva de gas y petróleo no convencional más importante del mundo, así que los que revolotean no lo hacen sólo por las finanzas sino por los recursos naturales.


Lo dicho: mientras en México entregamos el petróleo a las trasnacionales con la ventaja incluso de expropiar en su favor terrenos comunales y ejidales donde encuentren yacimientos, cuando los dueños originales no quieran vender o no les convenga el precio de venta, Argentina nos ofrece otra lección de dignidad latinoamericana.

viernes, 6 de junio de 2014

Oportunidades y pobreza

Una de las razones por las que en México falla la política social --como el programa Oportunidades-- con la que, según eso, se intenta sacar a la gente de la pobreza, radica en que se parte de un falso supuesto: que esa condición es resultado de circunstancias fortuitas y que, por tanto, puede superarse apoyando a las familias empobrecidas para que sus nuevas generaciones puedan labrarse un futuro mejor.

Nacer o no en una familia miserable puede ser, en efecto, cuestión de mala suerte, lo que no lo es, es la existencia de la miseria. Esta es resultado de un sistema en que la riqueza y el poder son acumulados en la estructura de producción mediante la explotación de algunos grupos sociales por parte de otros.

Debido a que esos programas sociales no están orientados a modificar este sistema de acumulación, jamás podrán acabar con las condiciones estructurales que permiten la reproducción de la pobreza de generación en generación. Por eso se critica su carácter asistencialista, es decir, que asisten, ayudan a sobrellevar una situación extrema, pero no aspiran --aunque la propaganda gubernamental y la manipulación televisiva lo afirmen-- a erradicarla.

Por si la evidencia empìrica no fuera suficiente a demostrar lo anterior, un análisis conjunto entre la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) revelan que programas como oportunidades no mejoró en más de dos décadas las condiciones que permitirían a las familias salir de pobres.

La Cepal y la OIT recuerdan que esos programas de apoyo económico parten del supuesto de que con esas ayudas los hijos de los hogares así favorecidos tendrían mejor educación, salud y nutrición, lo que les permitiría insertarse mejor en el mercado laboral y salir de la pobreza por sus propios medios.

La mala noticia es que el sistema de acumulación imperante (la causa estructural del problema) ha determinado reducir las oportunidades laborales, pues sus mayores ganancias las obtiene con la especulación financiera y así, casi no requiere de mano de obra, y a la que emplea le ofrece salarios miserables.

De modo que los beneficiarios de Oportunidades, si bien aumentaron su nivel educativo, de poco les sirvió porque ahora de lo que carecen es de oportunidades laborales y productivas, y así siguen sin salir de pobres.

Las mediciones Cepal-OIT mostraron que de los jóvenes registrados en Oportunidades en la década pasada, 40.2 por ciento de las mujeres y 74.1 por ciento de hombres "permanecían en una categoría ocupacional igual o inferior a la de sus padres". Esos porcentajes eran similares a los reportados para jóvenes que no fueron beneficiarios del programa: 43.6 por ciento en mujeres y 71.7 por ciento en hombres.

Ambos organismos señalan que si bien esas ayudas aliviaron en alguna medida la pobreza, no contribuyeron a una ruptura de los factores que la producen de generación en generación.

Ya podrán venir cruzadas o mafufadas contra el hambre (con su correspondiente cauda de corrupción y compra de votos), pues mientras el modelo de acumulación no cambie, los pobres seguirán siéndolo y en México infancia seguirá siendo destino.

martes, 27 de mayo de 2014

El efecto Aristegui

Carmen Aristegui se ha convertido, quizá a despecho de ella misma, en un fenómeno mediático de alcances masivos. Es, para decirlo en términos farandulescos, un imán de taquilla que abarrota cualquier escenario en el que se presenta.

Debe su celebridad a una ya persistente independencia editorial que le permite ejercer lo que Chomsky llama la primera obligación del periodista: presentar a su auditorio los temas que verdaderamente importan, lo cual no es poca cosa en un país en que la mayoría de las voces están constreñidas por compromisos comerciales o políticos.

Otros factores que han contribuido a su arrastre público son los polémicos despidos (Televisa en dos ocasiones y hasta de MVS) de que ha sido objeto y las ominosas maniobras de quienes por diversos medios intentan socavar su credibilidad.

Y sin embargo, alrededor de su figura se produce un sesgo pernicioso que es preciso advertir porque tiene que ver con el desarrollo político de las audiencias.

El pasado 23 de mayo Aristegui acudió al coloquio Los grandes problemas nacionales organizado en la UNAM. Las sesiones de lo que resultó un espléndido ciclo de conferencias transcurrían con regular entrada hasta ese viernes en el que, al influjo de su nombre, el lugar se colmó con sus seguidores. Concluida la participación de la periodista, la sala volvió a vaciarse, no obstante que enseguida otros reconocidos analistas examinarían el tema de la reforma del Estado.

El tumulto que se formó alrededor de la comunicadora se extendió hasta el lobby de la sala donde decenas de asistentes buscaron saludarla o tomarse una foto con ella, al cabo de lo cual abandonaron el lugar desentendiéndose del resto del coloquio.

El episodio llama la atención porque revela la persistencia, en ese público que se supone de otro nivel, de comportamientos fetichistas como los que se dice que Televisa induce entre el público para asegurar el culto acrítico hacia sus estrellas. En tales casos la imagen queda a cargo del escenario para ser consumida por una masa desatendida del contenido, si es que alguno hay.

Sorprende que un público que seguramente se considera a sí mismo consciente y politizado incurra en prácticas propias de fans de estrellas insustanciales. Es como corroborar que las estructuras de dominación, latentes en los medios de comunicación, están ya tan arraigadas que se expresan aunque no se ejerzan de forma deliberada o consciente, y que todas las relaciones que tienen lugar dentro de esas estructuras están indefectiblemente afectadas por éstas.

La hipótesis de trabajo al calce sería que con independencia de si se trata de personajes progresistas o no, la mediatización de que son objeto anula el mensaje reflexivo y crítico y sólo deja lo más a la mano: el culto a la personalidad propio del star system.

En un coloquio en el que se insistió --la propia Aristegui lo hizo-- en que la solución a los graves problemas que padecemos radica en la participación consciente, y en el empuje y rebeldía de que sea capaz la sociedad, resulta paradójico constatar que en la franja de población que se supone con mayor desarrollo político persistan prácticas y pulsiones propias de las masas despolitizadas a las que con frecuencia se critica.  

En este caso el mensaje crítico, reflexivo e informado que Aristegui pretende hacer llegar a sus audiencias para que cuenten con elementos de análisis y participen en el debate democrático de las cuestiones públicas queda anulado o al menos diluido por la imagen mediática que se ha construido la propia Aristegui.

lunes, 26 de mayo de 2014

Los grandes problemas nacionales


Ante el avasallamiento del capital financiero transnacional lo que México requiere es la reconstrucción del Estado, lo que equivale a decir, la reconstrucción de un proyecto nacional que ponga por delante los intereses de la nación y los del pueblo.

Con este planteamiento --formulado por Porfirio Muñoz Ledo, Jorge Alcocer y Fernando Pérez Correa-- concluyó el coloquio Los grandes problemas nacionales organizado en la UNAM, en ocasión del centenario de la obra homónima publicada en 1906 por don Andrés Molina Enríquez, por la Coordinación de Difusión Cultural y el diligente diplomático Héctor Vasconcelos.

En una época en que los estados nacionales están en vías de ser suplantados por estados transnacionales la aseveración de los mencionados conferenciantes da en el blanco porque describe la naturaleza de nuestros desórdenes actuales, aunque deposita la esperanza de salvación en un Estado que, como el mexicano, en realidad nunca gestionó los intereses populares.

De todos modos para los analistas señalados la reconstrucción del proyecto nacional resulta clave porque el punto de quiebre que nos condujo a la situación actual ocurrió --en palabras de Pérez Correa-- cuando se abandonó la función del Estado como articulador de los intereses de las mayorías.

Este abandono, afirmó Muñoz Ledo, llegó con la hegemonía del poder financiero que ha sometido al país a un "vaciamiento de soberanía" durante los últimos 30 años con la consecuente entrega del patrimonio nacional, por lo que --dijo-- la vía es la reconstrucción del Estado y del proyecto nacional con el propósito de resolver el gran problema que ha traído consigo la concentración del poder en México: la desigualdad social. Si no se resuelve este tema --sentenció-- no habrá solución alguna.

Jorge Alcocer reconoció que en el pasado reciente, y ante la urgencia de abrir cauces a la alternancia en el poder, se confundió la reforma política ("nos ganó lo electoral") con la reforma del Estado, por lo que llamó a volver a poner las cosas en su lugar y empezar por restablecer la justicia social, pues en último término, definió, la reforma del Estado consiste en colocar por delante los intereses de la nación que no pueden ser otros que los del pueblo, porque el Estado jamás puede declinar sus compromisos y responsabilidades históricas con la sociedad.

En las sesiones de los días previos, el maestro Bernardo Bátiz había dicho que en México no existe un verdadero Estado de Derecho, que hay una simulación permanente entre la ley y la realidad y que nuestras normas jurídicas son abundantes, confusas, mal redactadas y con frecuencia malintencionadas.

Nuestro país --añadió-- ya no es nuestro, se diluye en el mundo global por la pérdida diaria de soberanía: ni nuestro territorio es ya nuestro, ni hay supremacía del gobierno adentro, ni autonomía e independencia hacia afuera, lo que ilustró con las reformas estructurales como la energética a la que catalogó como "verdadera traición a los intereses nacionales".

En el ámbito educativo, el doctor Manuel Gil Antón, del Centro de Estudios Sociológicos de El Colegio de México, refirió que el desastre educativo que padecemos ha provocado que al cabo de nueve años de educación básica, saber o no saber leer se parezca a un volado sesgado por la desigualdad social.

El dato de que la mitad de los alumnos de 15 años carezca de la capacidad para estructurar argumentos, muestra que el sistema educativo mexicano ha atrofiado las estructuras cognoscitivas indispensables para aprender y seguir aprendiendo, así como la capacidad crítica de los estudiantes, aseveró.

Y lo peor: que el sistema sea tan excluyente que los jóvenes ya ni siquiera tengan derecho a formarse en la fila que quieren porque a los más pobres se les tiene reservada una educación que no es la universitaria. Todo ello, aseguró Gil Antón, configura un país en el que origen sigue siendo destino y en el que vale más tener conocidos que conocimientos.

Considerada por varios de los participantes en el coloquio. junto con la desigualdad, como uno de los principales problemas nacionales, la corrupción fue atribuida por Agustín Basave Benítez (Universidad Iberoamericana), a la falta de correspondencia entre la ley y la realidad, de tal forma que es más fácil, rápido y barato violarla que cumplirla.

Atribuyó el problema a un mal diseño legislativo que aspira a promulgar normas perfectas, cuyo cumplimiento implica casi un apostolado por parte de los ciudadanos, en vez de normas asequibles, imperfectas si se quiere, pero acordes con la realidad cotidiana.

Las leyes no se cumplen porque no están hechas para cumplirse, pues son de tipo aspiracional por lo que la realidad siempre va detrás de ellas. Así, señaló que requerimos una nueva constitución, breve, concisa y con normas hechas para el día a día, sólo así podrá pretenderse disminuir la corrupción que, dijo, se ha convertido en un comportamiento colectivamente racional.

En su turno el doctor Lorenzo Meyer expuso su teoría de que en México transitamos de un partido de Estado a una partidocracia en la que el sistema de partidos políticos se ha convertido en un obstáculo para la democracia, por los controles que ejercen sobre los puestos de elección popular y sobre los dineros públicos (los llamados "moches").

Siguiendo al sociólogo alemán Robert Michels, para el que todo partido político es una organización oligárquica y la democracia una lucha entre estas élites oligárquicas, Meyer indicó que el problema es mayor cuando esas oligarquías no compiten sino que se ponen de acuerdo para gestionar sus intereses y atropellar la voluntad popular, como lo evidenció aquí el llamado Pacto por México.

En la sesión en que se analizó el tema de los medios de comunicación la periodista Carmen Aristegui habló de los signos de regresión autoritaria que han caracterizado la instalación del PRI en la presidencia de la república. Entre ellos destacó el sometimiento del Congreso vía el Pacto por México, mediante el cual se aprobó un conjunto de reformas, cuya rapidísima gestión hizo imposible que la ciudadanía pudiera entenderlas siquiera con lo que fue dejada al margen de la discusión y el debate democrático necesario ante cambios que van a modificar la configuración del país.

En ese contexto dijo que el elemento que más conspira contra la libertad de expresión de las ideas en los medios de comunicación en tiempos de paz es la excesiva concentración, con el agravante de que en México el duopolio televisivo ya ni siquiera compite, por lo que vaticinó que la democracia no será en este país hasta en tanto no se liberen los medios y no haya una disputa real por las audiencias.




viernes, 23 de mayo de 2014

"Democracia Cadáver"

El filósofo clásico y ensayista Luciano Canfora resume, certero, la realidad del mundo actual, en una entrevista publicada en "Babelia", el muy recomendable suplemento sabatino del diario El País (26.04.14):

Un sistema político en el que mandan, porque son la mayoría, los ricos no es una democracia, es una oligarquía...para mí la democracia no es el hecho de que gobierne la mayoría después de hacer el recuento de votos, es el Estado social, el hecho de que quienes no poseen la riqueza cuenten en la vida política y tengan el modo de hacerlo.

P. Teniendo esto en cuenta, ¿entonces ahora en qué sistema vivimos?
Estamos asistiendo a un cambio importantísimo. El andamiaje es igual y sigue en pie --el Parlamento, las elecciones--, pero la realidad es que se ha desarrollado y consolidado un fortísimo poder supranacional no electivo, de carácter tecnocrático y financiero...Uno podría decir, por tanto, que la democracia ha muerto, que sólo permanece el cadáver que camina --se hacen elecciones, leyes--, porque quien decide lo hace sin contar con un parlamento.

P. ¿Quien decide entonces?
Una oligarquía fundada en los intereses de grandes grupos financieros, que son el verdadero poder. Los grandes grupos financieros que tienen un poder mundial e ilimitado pueden decidir el destino de todos. El parlamento europeo que elegiremos en mayo es un seminario universitario, no tiene ningún poder real, sólo aquel de crear una clase de parásitos muy bien pagados, preciosísimos para el sistema, porque sirven para hacer ver que existe un parlamento y que Europa no es completamente antidemocrática. Por eso les pagan tanto.

P- Si este retrato descarnado es cierto, ¿cuál es la salida?
Diré algo que igual parece anacrónico, pero en la situación actual de las cosas el único lugar en el que se puede explicar el mecanismo democrático es el Estado nacional. Porque tiene la medida en la que las clases contrapuestas pueden contar.
...
Hasta ahora no se ha conseguido detener a los poderes financieros (y) los partidos socialistas no han sido capaces de plegar a la utilidad social al capital financiero. No era tampoco una empresa fácil. Pero no creo que haya alternativa más que el intento de volver a traer al movimiento socialista a los fines para los que nació.

martes, 20 de mayo de 2014

Move Up o el voluntarismo a domicilio


Andrés Roemer, un académico venido a ideológo de la superación personal por cuenta del Grupo Salinas --el de TV Azteca, no se confunda el lector con el otro-- y Clotaire Rapaille, un mercadólogo francés naturalizado estadounidense y de quien ya hemos dado cuenta en este espacio por ser autor de El código cultural, en el que está basada la campaña peñanietista "Mover a México", acaban de pergeñar un libro titulado Move up, así, en inglés, como corresponde a los adoradores del levemente decadente American way of life que promueven.

El volumen (Taurus, 2013) lleva como sugerente subtítulo la pregunta: ¿Por qué algunas culturas avanzan y otras no?. Y la respuesta, no por obvia menos penosa, consiste en afirmar que las sociedades --y las personas-- que progresan son aquellas abiertas al cambio y a la innovación; las que no se preocupan por el statu quo ni se quedan estacionadas en la tradición.

Aunque en la introducción niegan que se trate de un libro de autoayuda, el texto lo es claramente no sólo por el voluntarismo al estilo de "querer es poder" que pregona (al margen claro de las condiciones de subordinación y pobreza estructural que la globalización y su programa de reformas estructurales ha traído al mundo con su cauda de desempleo y precarización salarial) sino por el estilo desenfadado aderezado de "historias de éxito" que, dicen, son propias de los --but of course-- start-ups (emprendedores).

Aunque acusan a América Latina de no crecer por ser un continente atrapado por las ideologías, Roemer y Rapaille despliegan a placer la suya que no es otra que la del neoliberalismo rampante, cuya promoción es, en último término, el propósito del libro:

"El respeto a los derechos de propiedad es crucial para cualquier país que quiera avanzar (Move up). Con estos derechos establecidos en forma clara y adecuada (y un sistema judicial que los salvaguarde) la población es libre de usar su potencial inventivo...si no ¿cómo vas a crear algo nuevo si no tienes la certeza de que te pertenece? Y ese es el gran dilema de América Latina. Es una región del mundo en la muchas ideologías se cruzan (sic). Nada está claro y, por lo mismo, su crecimiento está estancado. La propiedad privada combinada con la libre competencia y la legalización de la libertad es la mejor forma de hacer que las cosas funcionen (p. 172).
 Se trata, como se ve, de la misma coartada de siempre: acusar de ideologizantes a todas aquellas políticas que no favorecen la ideología capitalista, pues en la continuación de su programa político abogan también por la reducción de impuestos para las empresas, arguyendo que sin recompensas, la libre empresa carece de estímulos para contribuir a la prosperidad colectiva.

Y es que --dicen-- aunque las reducciones impositivas ahonden la brecha de desigualdad, lo harán hacia arriba, por lo que incluso los pobres saldrían ganando. Curiosa lógica de estos autores que, ya se sabe-- no han escrito un libro sobre economía como se ufanan en la presentación, sino un simple libelo neoliberal con las mismas manidas ideas y trampas argumentales de siempre en quienes profesan esta ideología.

Nada digno de un Roemer que se ostenta como CEO del Festival Internacional de Mentes Brillantes, la Ciudad de las Ideas, el proyecto ideológico de penetración cultural de la televisora del Ajusco. Contagiados por el lugar común en que incurren los autores digamos que en este volumen las ideas brillan, pero por ausentes.  

martes, 29 de abril de 2014

Irán y México, lo mismo para todos.


En junio próximo cumplirá un año desde que fue electo presidente de Irán. Hasan Rohani prometió entonces reactivar la economía, castigada sobre todo --se dijo-- por las sanciones internacionales a causa del programa nuclear impulsado por el antecesor Mahmud Ahmadineyad, quien para escándalo del "mundo libre", beneficiaba con subsidios a 95 por ciento de los 77 millones de iraníes.

Con Rohani la economía no ha mejorado, pese a que se avino a las presiones de Washington sobre el programa nuclear para aminorar las sanciones, y a que ha recortado los subsidios.

Pese a ser el cuarto productor mundial de crudo, hace unos días el gobierno incrementó 75 por ciento el precio de la gasolina, como parte de un plan para reducir los subsidios de los energéticos y acercarlos a su verdadero valor de mercado.

La misma cantaleta se adujo aquí para recetarnos el programa mensual de gasolinazos: que estábamos por debajo de los precios internacionales de las gasolinas y había que igualarnos para ser "competitivos".

No es casual. Ese es el programa del capitalismo global: incorporar a todos a la misma lógica, sean de Latinoamérica, de Medio Oriente o de Asia: lo mismo para todos.