martes, 5 de marzo de 2013

Elba Esther y la restauración

Foto: @PRI_NACIONAL

La defenestración de Elba Esther Gordillo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y la declarada sumisión del Partido Revolucionario Institucional (PRI) al gobierno de Enrique Peña Nieto marcan el inicio formal del proceso de restauración presidencialista, con su aura de autoritarismo vertical que caracterizó al sistema político mexicano desde su formación en 1929.

Asistimos hoy a la restauración de presidencialismo y a la puesta al día de uno de sus mecanismos más eficaces: el control corporativo de la sociedad como vía no para la construcción de consensos, sino para la imposición de la unanimidad.

En ese proyecto, resultaban esenciales dos cosas:

1. Que las distintas parcelas de poder --que tras el interregno panista parecían haber ganado autonomía-- recordaran dónde se encuentra la verdadera fuente de su poder y de sus negocios. 

La temprana declaración del nuevo gobierno de que recuperaría la rectoría del Estado en materia educativa, era en realidad una advertencia de alcances más amplios: el poder político reestablecería para sí el control de los negocios y cacicazgos inherentes a éste o a cualquier otro sector, público o privado: petróleo, telecomunicaciones, gobiernos locales (recuérdese como al perder la presidencia, el partido se atrincheró en el ámbito de los gobiernos estatales, cuya mayoría nunca perdió, y que así ganaron cierta autonomía del poder central).

La caída de la maestra no fue sino el golpe de autoridad requerido para recordar a los principales liderazgos que el sistema está de vuelta, que, como siempre, está al tanto de las trapacerías de todos y que a menos que se plieguen a los nuevos designios, tendrán que entregar sus cotos de poder y, si se ofrece, ir a prisión previa exhibición pública de sus sabidas corruptelas. De ahí la advertencia-mensaje en voz de Peña Nieto durante su unción como jefe máximo del PRI:  en México "no hay intereses intocables".

2. La recuperación del Partido como suministrador, mediante sus tres sectores tradicionales, de la base social incondicional (las llamadas mayorías) que apoyará sin ambages el proyecto de privatización neoliberal del nuevo gobierno, y que le dotará de una imagen, así sea escenográfica, de respaldo popular. 

El control corporativo se restaura y se recarga mediante la regla básica: sumisión e incondicionalidad absolutas al poder central. Así, el llamado Pacto por México es, a su modo, una variante ampliada del corporativismo oficial, dentro del cual cabe toda la sociedad. Sólo que a los tres sectores del Partido (campesino, obrero y popular) se agrega ahora un cuarto: el de los partidos políticos representados en el Congreso, dispuestos a aprobar las leyes necesarias para el nuevo diseño en el que concuerdan.

Así, el cerco de control y dominación política sobre la sociedad queda completo. Como antaño, la unanimidad es el rasgo distintivo. Todos a uno coinciden en qué es lo mejor para el país, y todos a uno están de acuerdo en los medios: las reformas estructurales en trabajo, educación, energética, telecomunicaciones y fiscal (incluido el IVA generalizado en alimentos y medicinas).

En esa redistribución del negocio-país, que supone cada una de esas reformas, la reafirmación del poder político, con el presidente en la punta de la pirámide, es necesaria para  evitar que la clase política sea desplazada por el avasallante poder económico. Si bien aquélla es un desdoblamiento de éste, no hay una subordinación mecánica y en esa relación se producen confrontaciones y disputas por la definición de fronteras.

En ese marco, el reposicionamiento del poder político frente al económico tuvo otra señal en la reforma al juicio de amparo, la cual arrebató a los particulares en ejercicio de una concesión, el recurso de la suspensión provisional que les permitía seguir explotando el bien hasta en tanto se resolviera el asunto de fondo.

Pero se trata sólo de disputas coyunturales porque la clase política priista es parte de la burguesía local aliada al capital trasnacional en el diseño y aplicación aquí de los postulados del neoliberalismo globalizador ahora en su face financierista (esa a la que los costos de producción y el trabajo asalariado le pesan tanto que los considera una carga que reduce la renta del capital, y prefiere por ello concentrarse en obtener ganancias a partir de la especulación financiera, donde la deuda soberana de los países es una de los principales alimentadoras del sueño máximo: crear dinero sólo a partir de dinero, sin trabajadores, sin fábricas ni sindicatos).

A eso apuntan las reformas estructurales. Si se mira con atención, se verá cómo en la reforma laboral del año pasado, uno de los principales puntos consistió en favorecer el despido del trabajador sin responsabilidad ni costo para el patrón, cuando éste considerara, después de un contrato por un mes, que aquel no era apto.

Eso significa terminar con una conquista laboral: estabilidad en el empleo, que implica la obligación de indemnizar al trabajador despedido. La reforma educativa postula básicamente lo mismo. La permanencia en el empleo queda supeditada a la aprobación de exámenes que calificará el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE), una entidad autónoma, pero cuyos comisionados serán designados por el presidente, con lo que se presume que cuando se requiera adelgazar la planta docente, se "reprobará" al número de maestros que se requiera en cada coyuntura.

Además, ese mecanismo de inestabilidad en el empleo servirá para favorecer a los empleadores particulares, pues no se olvide que el diseño de mediano plazo es avanzar también en éste ámbito hacia la privatización educativa.


martes, 5 de febrero de 2013

México ¿tigre Azteca?

Los "análisis" que la prensa extranjera escribe sobre México resultan casi siempre inexactos. Su tendencia a esquematizarlo todo, los hace incurrir en simplificaciones por completo ajenas a los complejos procesos políticos y sociales por los que transita nuestro país. Más si se trata de medios de la derecha financiera como el Financial Times.

En un texto titulado "México: tigre Azteca", firmado por Adam Thomson, el pasado 30 de enero, ese rotativo muestra su entusiasmo desbocado por la figura de Enrique Peña Nieto, mostrándolo como el reformador que salvará México. No obstante sus inclinaciones ideológicas, se trata de un medio de gran prestigio internacional, que arrastra en  textos como el comentado, carente del mínimo rigor profesional y de un desconocimiento absoluto de la realidad que pretende analizar.

Juzgue el lector mediante esta traducción que ofrece Contadero:

  
México se ha convertido en el símbolo de un nuevo dinamismo económico y en la nación predilecta de los inversionistas internacionales, por encima de Brasil, cuya economía ha perdido lustre.

La economía mexicana creció cerca de cuatro por ciento durante el último año, casi el doble del promedio anual registrado en lo que va del siglo.

Este mes, Larry Fink, quien encabeza Black Rock, la compañía más grande del mundo en el manejo de valores llamó a México "una increíble historia de crecimiento". En tanto, Lisa Schillener, de Standar and Poor's, la agencia calificadora de deuda, dijo que el rango BBB de la deuda soberana del país podría estar a punto de ser elevado si México aprueba las cruciales reformas estructurales.

Los inversionistas extranjeros han salido masivamente a colocar su dinero en México, dice el rotativo inglés. Y añade como prueba que durante los primeros nueve meses de 2012 fondearon 57 mil millones de dólares en acciones y bonos mexicanos, más de cinco veces la cantidad que invirtieron en Brasil durante el mismo periodo.

Eso está a años luz de los tiempos sombríos que afectaron al país hace unos años, cuando algunos comentaristas estadounidenses poco impresionados por el bajo crecimiento y alarmados por la violencia relacionada con las drogas comenzaron a sugerir que México podría convertirse en un Estado fallido.

¿Qué ocurrió que convirtió a México en un buen prospecto? y ¿está justificado el optimismo del centrista Partido Revolucionario Institucional (PRI)? Después de todo --recuerda el texto-- la última vez que hubo tantas expectativas acerca de las perspectivas de la economía mexicana, durante la administración del priista Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), el país terminó en la agonía del llamado efecto Tequila, con una aguda devaluación y una muy severa recesión.

La más reciente respuesta a la primera cuestión se llama Enrique Peña Nieto. Desde que el ex gobernador estatal de 46 años ganó la elección presidencial de julio para el PRI, los inversionistas lo han visto como la mejor oportunidad de liberar al congreso de la parálisis que ha bloqueado las reformas estructurales, las cuales muchos analistan creen que podrían transformar la, con frecuencia indolente economía mexicana, en un tigre Azteca.

Los intereses internacionales en México están demasiado enfocados en las capacidades del país como una base de producción desde donde las compañías pueden exportar hacia Estados Unidos. Pero las reformas del señor Peña Nieto intentan cultivar un ambiente más saludable para que las inversiones del exterior lleguen a la economía doméstica. Él está buscando introducir más competencia en telecomunicaciones y energía mientras da pasos para sacudir a los notoriamente ineficientes sistemas de impuestos y educativo.

Muchas de las esperanzas de que pueda ser capaz de empujar las reformas descansan en el propio PRI, el cual gobernó México por 71 años consecutivos bajo una cuasi democracia, hasta que perdió el poder en 2000. Durante ese periodo muchos mexicanos asociaron al PRI con la corrupción y el fraude electoral; como un partido cuya organización tentacular asfixiaba los procesos democráticos para retener el poder.

Al mismo tiempo, sin embargo, muchos vieron al partido como la única fuerza política con suficiente capital humano y experiencia para gobernar eficazmente. Es muy difícil decir lo mismo del izquierdista Partido de la Revolución Democrática, el cual nunca ha conseguido la presidencia, o del conservador Partido Acción Nacional, el cual durante las pasadas dos administraciones de Vicente Fox y Felipe Calderón, promovió reformas estructurales, pero finalmente careció de la capacidad política para funcionar con un congreso dividido.

Como dice Luis Rubio, del Centro de Investigación para el Desarrollo: "El problema real de México es que por años no hemos tenido un presidente que pueda hacer las cosas".

Durante sus recorridos de campaña y ahora como presidente, el acicalado y pro empresarial señor Peña Nieto ha trabajado duro para distanciarse a sí mismo de la pobre relación histórica del PRI con la democracia y la transparencia, en particular durante el gobierno del señor Salinas, aunque éste tiene influencia en la actual administración. El señor Peña Nieto ha tratado de asociar su partido con una reputación de eficiencia y gobierno efectivo.

La imagen de eficiencia ha viajado rápidamente. Cuando el señor Peña Nieto se reunió con Barack Obama en noviembre, el presidente estadounidense expresó su confianza en que desarrollaría una relación cercana con un líder mexicano que "tiene una excepcional de reputación de querer ver las cosas hechas".

Políticamente el señor Peña Nieto ha promovido la idea de un gobierno incluyente.Un ejemplo obvio es el señor José Antonio Meade, quien fue secretario de Hacienda durante la anterior andministración centro-derechista. Otro es el nombramiento de Rosario Robles, una ex líder del izquierdista PRD, como secretaria de Desarrollo Social, un cargo importante en un país donde casi la mitad de la población vive en la pobreza.

Eso contrasta con el gabinete del señor Calderón, el cual careció de figuras pertenecientes a todo el espectro político. Poco después Peña Nieto extendió esta rama de olivo a la oposición, y apenas 24 horas después de haber sido investido como Presidente, produjo el Pacto por México, un documento con 95 propuestas de reformas firmado por los líderes de los principales partidos polìticos.

Algunos observadores vieron el pacto sólo como otra hoja de papel- "Ha habido decenas de esas cosas a través de los años", argumentó Carlos Elizondo, un profesor del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), una institución de educación superior. "Y ninguno de ellos ha contado nunca para nada".

Pero Duncan Wood, quien encabeza el Instituto México del Wilson Center, cree que el pacto, con todo y su ambiguedad en algunos temas, muestra la determinación del señor Peña Nieto por sobreponerse a la parálisis política que ha impedido realizar las reformas. "es una propuesta política", dice el señor Wood. "Y se ajusta a la tradición del PRI de tratar de construir concensos".

Con el mismo espíritu, el señor Peña Nieto se convirtió este mes en el primer presidente mexicano en dos décadas en visitar la sede del Senado para desayunar con un grupo de legisladores. Por supuesto que los factores económicos también han ayudado. La hábil conducción económica ha producido una baja récord en la inflación y en las tasas de interés.

Ello ha resultado en un alza histórica en las reservas internacionales y modestos niveles de deuda pública. México está compitiendo eficazmente con China por los mercados estadounidenses. Los altos costos de transporte y el incremento de salarios en Asia, están haciendo de México una más atractiva base para la exportación de manufacturas.

Pero lo que ha emocionado a los inversionistas privados es la aparente determinación del señor Peña Nieto de acelerar el crecimiento pasando por los intereses creados del país. Esto lo enfrentará con los poderosos jefes sindicales, como Elba Esther Gordillo, la formidable líder del influyente sindicato de maestros.

Los críticos alegan que ella posee una impresionante colección de propiedades, incluida una lujosa villa cerca de San Diego. En diciembre, el señor Peña Nieto propuso sacudir el sistema restringiendo el poder sindical significativamente.

Los intereses creados también se extienden a los poderosos negocios, como los del señor Slim, los cuales dominan importantes sectores haciéndolo difícil para los competidores. Entre otras cosas, el Pacto del señor Peña Nieto propone introducir más competencia en telecomunicaciones, mientras debilita el control de Televisa y TV Azteca, el sector privado de emisoras, creando dos nuevas cadenas de televisión.

Aprovechando el pacto, el nuevo presidente de México está empujando las reformas fiscal y de energía, quizá para este mismo año. Esa no es una tarea sencilla. Los legisladores han invertido años debatiendo la necesidad de un ajuste fiscal, pero con poca utilidad.

Recientemente ellos han empezado a mirar el altamente protegido sector energético, el cual es controlado por Pemex, la compañía estatal de petróleo y un ícono histórico del orgullo nacional. México ha sido por largo tiempo uno de los 10 más grandes productores y aproximadamente un tercio del ingreso gubernamental proviene del petróleo.

Pero la ausencia de nuevos descubrimientos y el envejecimiento de los pozos petroleros ha llevado a una caída de 24 por ciento en la producción desde 2004. Incluso se ha predicho que México podría convertirse en un importador neto de petróleo si el gobierno no permite pronto al sector privado jugar un más grande papel en esa industria.

En una entrevista reciente con el Financial Times, el señor Peña Nieto reconoció las dificultades que estos temas podrían provocar. "Claramente hay posiciones ideológicas y partidistas sobre ciertos temas...no se trata de lograr una unanimidad, sino de alcanzar una mayoría".

Críticamente, aún hay restos de la guerra contra las drogas la cual ha cobrado alrededor de 70 mil vidas en los pasados seis años. El nuevo presidente quiere priorizar la seguridad de los mexicanos, sobre el asesinato o la captura de los más altos capos de las drogas. En un movimiento que él cree que dará resultados, colocó la seguridad pública, que hasta hace poco era un ministerio separado, bajo el control de la Secretaría de Gobernación.

La administración también está tratando de disuadir a los medios de la cobertura de la violencia desechando la práctica --común durante la administración del señor Calderón-- de citar a conferencias de prensa para mostrar la captura de traficantes.

Los expertos admiten que no hay soluciones rápidas. Como dijo el señor Wood, del Wilson Center: "si los niveles de violencia no caen, se convertirá en un gran problema para el gobierno".

Los desafíos son inmensos, pero los avances en el Congreso y los grandes signos de cooperación interpartidista sugieren que el señor Peña Nieto y su equipo poseen las habilidades políticas necesarias para levantar los candados políticos. Como dice el señor Rubio: "Los profesionales están de regreso. Ahora tenemos que ver si consiguen hacer las cosas".

viernes, 1 de febrero de 2013

Pemex: la hipótesis del atentado

El estallido registrado la tarde de ayer en el edificio B2 de la Torre de Petróleos Mexicanos (Pemex) dará lugar a muchas conjeturas, y acaso la única firme que puede formularse en estos momentos es que nunca sabremos la verdad, por lo menos oficialmente.

Tras la confusión inicial, ayer el gobierno federal siguió los pasos de los manuales de comunicación para casos de crisis: estableció un férreo control en la zona y definió un vocero único --el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong-- para evitar la cascada de versiones diferentes o encontradas y la consiguiente percepción de incapacidad o falta de control gubernamental. La estrategia tuvo un ajuste esta mañana, cuando quien se enfrentó a los medios en una conferencia de prensa fue el director de la paraestatal, Emilio Lozoya Austin, ausente durante las primeras horas de la tragedia por encontrarse, se dijo, en un viaje por Asia.

Acaso la medida obedeció a la necesidad de evitar que se generalizara la percepción de falta de liderazgo por estar el principal responsable de la empresa ajeno a la crisis que la afecta. De cualquier forma, el hijo de su papá, el salinista Emilio Lozoya Thalmann, se dedicó a balbucear lugares comunes ("la empresa y los trabajadores saldremos fortalecidos de esta situación"), anunció que no habrá desabasto de gasolinas y se negó a "especular" sobre las posibles causas del percance, aunque en una entrevista posterior con Primero Noticias de Televisa, pudo haber incurrido en el desliz de aceptar que todo se debió a un "accidente", cuando tanto el secretario de Gobernación, como el propio Enrique Peña Nieto habían sido muy cuidadosos la víspera en evitar el uso de términos que pudieran causar alarma.

Las primeras versiones de que se habría tratado de la explosión de una caldera, han sido desmentidas por quienes afirman que en ese edificio no existen tales por tratarse de un inmueble administrativo; en seguida se ha sugerido la idea de que allí se resguardan contratos finales que habrían buscado destruirse ante los recientes escándalos de corrupción en la paraestatal.

Un hecho notorio ocurrió alrededor de las 10 de la noche cuando rescatistas, trabajadores y personal de seguridad salieron en estampida de la zona de desastre en que se encontraban. Se dijo que se encontró una bomba, aunque en la conferencia de prensa nocturna Osorio Chong refirió que la alarma se debió a que una parte del tramo siniestrado había terminado de colapsarse.

Sin embargo, Francisco Santana, reportero de Televisa, dijo al aire a Joaquín López Dóriga que miembros del Erum, de bomberos y de la Cruz Roja señalaron que su apresurada salida del lugar siniestrado no se debió a la caída de alguna estructura, sino que fueron desalojados por el ejército, cuyos mandos afirmaron que a partir de ese momento ellos se encargarían del trabajo en la zona.

Sea de ello lo que fuere, una certeza se va imponiendo en la percepción general: si se trató de un atentado, la sociedad nunca lo sabrá. Una característica de los gobiernos priistas es que gustan de cuidar las formas y guardar las apariencias, de modo que sus gobiernos nunca parezcan estar en crisis.

Un atentado revelaría dos cosas igualmente catastróficas para ellos: la evidencia de que no gozan del consenso unánime que pretenden mostrar mediante simulaciones como el Pacto por México y que son vulnerables ante grupos que ante la cerrazón de las llamadas vías institucionales optan por manifestarse soterradamente mediante acciones violentas como la ocurrida.

Si las investigaciones revelaran indicios de atentado, el hecho nunca sería conocido por la opinión pública para evitar la percepción de un gobierno débil y con un poco eficaz aparato de seguridad interior ante enemigos invisibles, pues en México, a diferencia de lo que ocurre en otras latitudes, este tipo de ataques no son reivindicados por ningún grupo, lo que en cierto modo deja espacio al discurso gubernamental de que todo está bajo control...aunque sepan que no. Veremos.



 


viernes, 25 de enero de 2013

Cassez, García Luna y Televisa

La excarcelación de la ciudadana francesa Florence Cassez Crepin, condenada aquí a 60 años de cárcel por su presunta participación en secuestros perpetrados por la banda de Los zodiaco, reveló una vez más el enredijo de intereses y corrupción a que está sujeta la también presunta impartición de justicia en México:

La airada reacción de Televisa --expuesta mediante el espacio que conduce Joaquín López Dóriga-- contra el fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), no obedece a un genuino interés por las víctimas o por el cumplimiento del Estado de derecho, sino a la defensa de sus propias conveniencias, pues estuvo involucrada de manera principalísima y conciente de que se trataba de un engaño, en la transmisión en vivo --a través del noticiario Primero noticias, de Carlos Loret de Mola-- del montaje perpetrado por el secretario de Seguridad Pública del calderonismo, Genaro García Luna, mediante el que se pretendió haber capturado in fraganti a la banda en que figuraba la francesa, con el propósito de "vender" a la opinión pública la idea de que se acometía al crimen organizado de manera eficaz.

En la cobertura de estos días, la televisora jamás ha mencionado el nombre de García Luna como responsable, no de las fallas, porque no se trató de eso, sino del conjunto de maquinaciones ilegales operadas intencionalmente --de las cuales Televisa habría sido cómplice-- y que a la postre han puesto en la calle a la presunta secuestradora.


Pero no fue sólo ese montaje televisivo de por sí grave por la inducción que pudo operar en el imaginario de las víctimas, lo que al parecer inclinó la decisión de los magistrados. La ministra Olga Sánchez Cordero ha hecho saber que en el expediente que ha estudiado por más de un año, se omitieron actuaciones, como la comparacencia de quienes figuraban como implicados en la declaración de las víctimas.


En un exceso impropio de un comunicador, pero indicativo del talante con que se conducen esa empresa y sus personeros, en el noticiario de este jueves 24 de enero, López Dóriga se refirió en por lo menos dos ocasiones a Cassez como "la secuestradora", cuando en rigor, no fue sentenciada por ese delito.

Calderonistas como el empresario Alejandro Martí, Isabel Miranda de Wallace o María Elena Morera han condenado la decisión, culpando a la Corte, pero olvidando convenientemente al verdadero causante de la excarcelación de Cassez que tanto dicen lamentar.

Ninguno de esos actuales críticos, incluida la televisora, por supuesto, mostró la misma indignación cuando en agosto de 2009, el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), un organismo gubernamental dependiente de la Secretaría de Educación Pública (SEP) logró la liberación de 20 paramilitares que habían permanecido 11 años en prisión acusados, mediante pruebas testimoniales reales, de asesinar a 45 tzotziles de Acteal, pertenecientes a la organización Las Abejas, que oraban en una mezquita de madera el 22 de diciembre de 1997.

Como en el presente caso, el CIDE argumentó fallas en el "Debido proceso judicial" y consiguió que la Sala Primera de la SCJN absolviera a los inculpados sin juzgar sobre su responsabilidad, exactamente como se ha hecho ahora.

Tampoco en aquella ocasión la autoridad encontró necesario llevar a juicio a quienes incurrieron en torcer el "procedimiento debido" fabricando pruebas, testimonios o montando ilegales escenarios para el lucimiento personal ante las cámaras de televisión.

En último término, y conociendo la discrecionalidad de nuestro sistema de "justicia", no sería descabellado conjeturar que al final de cuentas el desenlace conocido no haya sido producto de otra negociación encaminada a ya cerrar un juicio incómodo para los actuales gobernantes de México y Francia.

martes, 22 de enero de 2013

Alertan sobre incremento de Norovirus

El editorial de febrero de The Lancet Infectious Diseases, reporta que a principios de enero J.van Beek, del Instituto Nacional de Salud Pública y Ambiental, de Holanda, y sus colegas advirtieron de un incremento mundial en casos de norovirus, con respecto al año anterior. En el Reino Unido la Agencia de Protección a la Salud reportó más de cuatro mil casos de laboratorio confirmados en la segunda mitad de 2012, que equivale a 63 por ciento de incremento respecto de 2011.

¿Qué hace a este virus un patógeno humano tan exitoso y qué puede hacerse para limitar su propagación? Descubierto en 1972, el nombre de Norovirus deriva de la ciudad de Norwalk, Ohio, EUA, donde el virus fue aislado por primera vez en 1968 después de un brote escolar de gastroenteritis.

Es una derivación de un virus ARN de la familia Caliciviridae. El género norovirus contiene una especie llamada virus Norwalk. Su genoma tiene una alta tasa de mutación, lo cual significa que --del mismo modo que el virus de la influenza-- frecuentemente adopta nuevas formas que pueden no ser reconocidas por el sistema inmunológico humano.

Así, van Beek y sus colegas sugieren que el actual aumento significativo de casos de norovirus está asociado con el surgimiento de una nueva variante del geno-grupo viral II, genotipo 4 (GII.4). Esta cepa, llamada Sydney 2012 fue reportada por primera vez en Australia en marzo de ese año. Nuevas cepas de GII.4 han emergido cada 2-3 años desde mediados de los años 90 y están ligadas al incremento en la actividad del norovirus.

La mutabilidad del genoma del norovirus es un factor que contribuye a convertirlo en la causa más común de gatroenteritis viral. El virus es también altamente contagioso: menos de 20 partículas virales son suficientes para causar la infección. La trasmisión es vía la ingesta de agua o alimentos contaminados, con el contacto con personas infectadas o mediante el contacto con fuentes contaminadas. El virus es suficientemente robusto como para sobrevivir durante días en una superficie y por meses en el agua.

Además de vómito y diarrea, los síntomas incluyen dolor abdominal, dolor de cabeza, fiebre, resfriado y dolor muscular. Afortunadamente la enfermedad rara vez dura más de uno o dos días, y los desenlaces fatales son muy raros y sólo son probables si la deshidratación no es manejada adecuadamente.

Por ejemplo, entre más de 20 millones de casos de norovirus estimados por año en EUA, hay aproximadamente 56 mil admisiones hospitalarias y 571 muertes. Así, la moderada virulencia asegura un enorme grupo de portadores, lo cual es otro factor que contribuye al éxito del norovirus.

Sin embargo, pueden ocurrir consecuencias fatales en niños muy pequeños, jóvenes y personas inmunocomprometidas. En países desarrollados, donde el acceso a la rehidreatación puede ser difícil, se estima que el norovirus mata cada año a 20 mil pequeños menores de cinco años.

No hay un tratamiento específico para gastroenteritis por norovirus. La investigación sobre posibles tratamientos se dificulta por el hecho de que el virus todavía no puede ser desarrollado mediante cultivos celulares. En 2011 fueron reportados los resultados de una vacuna experimental contra norovirus desarrollada por Ligocyte Pharmaceuticals.

La vacuna redujo significativamente el virus de la gastroenteritis en 69 por ciento en quienes recibieron el placebo y en 37 por ciento en quienes fueron vacunados. Dado que la inmunidad humana contra el virus parece no ser perdurable y debido a la propensión del antígeno, es probable que sería necesaria una práctica rutinaria de vacunación frecuente, con formulaciones que incluyan la cepa viral prevalente.

Las adecuadas prácticas sanitarias son la única protección hasta ahora contra el norovirus. El Reino Unido y Estados Unidos recomiendan una rápida limpieza del vómito y de las áreas circundantes, limpieza de superficies duras con detergente seguido de una solución con blanqueador (cloro), y el lavado del mobiliario suave y telas siguiendo las recomendaciones del fabricante.

Las personas contagiadas deben permanecer aisladas y evitar visitas, si fuera posible. La higiene de las manos es clave. Deben lavarse con jabón y enjuagarse por al menos 20 segundos. La eficacia de antibacteriales a base de alcohol es controversial, pero pueden ser útiles entre cada lavada de manos.

Considerado como uno de los patógenos humanos mejor adaptados, aunque la vacuna puede tener un día un papel en la lenta extirpación del norovirus, hasta ahora no hay más substituto para la prevención básica que la vigilancia epidemiológica y el control diligente de la infección, concluye el diario. 

viernes, 14 de diciembre de 2012

Mario Draghi, Hombre del año

El Financial Times designó a Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE) como el hombre del año por su éxito al preservar el euro luego de tres años de crisis. En un reportaje sobre el tema, Lionel Barber y Michael Steen señalan que el papel central del italiano en la crisis del euro --la historia más grande de 2012-- le ganó el voto del rotativo inglés.

Y aunque señala que otros notables personajes como la canciller alemana Angela Merkel y Mario Monti, el extrovertido reformista y primer ministro de Italia, han tenido también un papel central, Draghi ha sido un líder protagonista que insistentemente ha animado a gobiernos y bancos a apoyar las medidas necesarias para preservar al euro.

Los columnistas recuerdan la víspera de la inauguración de los juegos olímpicos de Londres, cuando Draghi se encontraba entre los panelistas de un evento planeado para promover la inversión extranjera en el Reino Unido. Eran momentos en que la moneda europea se desintegraba en medio de costosos y sofocantes préstamos a Grecia, España y a su natal Italia.

Estaban al día las especulaciones sobre el rompimiento de la Unión Europea y sus incalculables consecuencias financieras y políticas. Era el momento de trazar una línea en la crisis y el presidente del BCE lo hizo con dos frases:

"Dentro de nuestro mandato, el BCE está listo para hacer cualquier cosa para preservar el euro"...y después de una pausa efectista añadió: "Y créanme, será suficiente".

En retrospectiva, dicen los escritores, la declaración de julio --la cual en efecto emplazó a los mercados financieros a desafiar el ilimitado poder del Banco Central Europeo-- pudo bien ser vista como un punto de retorno en los tres años de crisis. El impacto de las dos breves frases de Draghi en aquel discurso fue inmediato y durable.

Lo describen como un hombre que deriva sus habilidades de una carrera variada: economista, banquero central, banquero comercial (Goldman Sachs) y servidor público. Pero por encima de todo, dicen, es un estratega que reflexiona profundamente sobre los problemas y una vez que su mente se impone del asunto es un duro perseguidor de sus metas. De algún modo ha sido más atrevido que su predecesor Jean-Claude Trichet.

Bajo el mando de éste último, el BCE respondió más rápido que el Banco de Inglaterra y que la Reserva Federal de EUA en la primera fase de la crisis financiera global, en el verano de 2007, cuando los mercados de crédito se enfriaron. Pero más tarde el francés se encontró acorralado por el Bundesbank, el banco central alemán, que era implacablemente hostil hacia pecados como deuda e inflación.

Draghi relevó a Trichet apenas hace un año. En esa ocasión dijo a sus amigos que estaba lejos de garantizar que triunfaría, no obstante la formidable política que apoyaría la moneda única. Estaba muy preocupado acerca del Bundesbank y la opinión pública alemana, pero él estaba decidido a darles su mejor golpe.

Su primer movimiento fue introducir una operación de refinanciamiento a largo plazo para los bancos. Como él mismo dijo, esa operación (la cual se desarrolló en dos faces en diciembre 2011 y febrero de 2012) removió la posibilidad de una crisis bancaria causada por una carencia de fondos. Al proveer de liquidez de corto plazo por los siguientes tres años, el EBC ayudó a evitar que el problema se extendiera a la soberanía y a los mercados de derivados de crédito.

Aunque la iniciativa calmó a los mercados preocupados por los bancos, no enfrentó el otro mayor problema de la eurozona: el amplio diferencial en el costo de los préstamos entre países deudores (Grecia, España, Italia, Chipre) y los países prestadores encabezados por Alemania.

Para la primavera de 2012 esto se había propagado hasta convertirse en una amenaza exacerbada por el riesgo de que la eurozona podría desmoronarse, con Grecia como el primer país en salir de la Unión. Enfrentado con este catastrófico escenario, Draghi y el estaf del BCE vinieron con una nueva propuesta: Transacciones monetarias inmediatas.

Aunque ninguno de los países deudores ha ido lejos en su aplicación, el resultado ha sido una dramática caída en el costo de los préstamos para los países periféricos y una renovada confianza en que el euro puede sobrevivir y lo hará.

viernes, 7 de diciembre de 2012

El Quijote y Lolita, arquetipos

En su notabilísima Introducción al Quijote, E.C. Riley alude a lo que parece ser una de las claves para la creación de personajes trascendentes en la literatura.

Al analizar la cuestión de las fuentes de la novela de Cervantes, ubica como posible precedente a "una distinguida pareja de cómicos italianos popular de 1574 en adelante. Éstos eran Bottarga (un hombre corpulento, de donde deriva la denominación de esos disfrases enormes utilizados en teatro y más recientemente en publicidad) y Ganassa (un hombre delgado).

"Es bastante improbable que Cervantes no los conociera, por lo menos de oídas, y es en cambio probable que, de manera consciente o inconsciente, su creación del personaje Don Quijote deba algo a Ganassa".

Riley asienta lo evidente respecto de Don Quijote y Sancho Panza: que no hay pareja de personajes en la literatura occidental que sea reconocible de una manera más inmediata y universal, incluso para la gente que no ha leído el libro.

Y añade que "este efecto no se debe únicamente a las dotes de Cervantes para la descripción breve y encendida, sino también a su identificación con un cierto elemento arquetípico".

Esta última afirmación coincide con una opinión de Jorge Luis Borges. En un texto sobre Nabokov, incluido en Apariciones, una antología de ensayos de Juan García Ponce, éste recuerda que en un escrito sobre Quevedo, Borges destacó que el autor español es, probablemente, palabra por palabra, el escritor perfecto, y sin embargo no ha alcanzado la popularidad que merece porque en su obra no existe un sólo prototipo, una figura ideal que cautive la imaginación como lo sería, evidentemente, Don Quijote, por ejemplo.

El propio Nabokov logró esa trascendencia con su novela Lolita, en la que se cumplió de nuevo el postulado de Riley y Borges: crear un arquetipo, en este caso Lolita: la ninfeta como símbolo sexual.

sábado, 1 de diciembre de 2012

El programa de Peña Nieto

Con un discurso que de seguro no entusiasmó ni a sus patrocinadores televisivos, se consumó lo que una amplia franja de la población considera la imposición de Enrique Peña Nieto como presidente de México.

En efecto, su discurso en Palacio Nacional fue un texto insustancial, con una retórica plagada de lugares comunes ("alentaré la unidad en la pluralidad") y un programa de 13 puntos de claro perfil gatopardista y, en algunos casos, hasta populista.

La estrategia del discurso recurrió claramente a viejas recetas priistas para conseguir dos efectos que sin embargo resultaron fallidos: primero, tratar de cambiar el ánimo social mediante llamados a la transformación del país por la vía --otra vez-- de la superación del atraso y la pobreza; y segundo: enumerando una serie de "decisiones" inmediatas para dar la impresión de que ya está al mando y de que no llega con las manos vacías.

Así, hizo saber que los cinco ejes de su gobierno serán: 1) un México en paz; 2) una nación incluyente que cierre la brecha de la desigualdad, que pase a ser una sociedad de clase media con igualdad de oportunidades, equidad y cohesión: 3) educación de calidad; 4) un México próspero con crecimiento económico y mayor competitividad en todos los ámbitos, y 5) Responsabilidad global con una diplomacia moderna e innovadora.

Nada que no hubieran ofrecido antes Luis Echeverría, José López Portillo, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox o Felipe Calderón. Casi medio siglo (42 años) de los mismos propósitos incumplidos ahora vueltos a renovar.

¿Puede alguien creer que habrá un país incluyente, sin desigualdad y crecimiento cuando el modelo económico que se aplica y que permanecerá intocado es el que precisamente produce exclusión, desigualdad y estancamiento?

Y esto porque se trata de un modelo económico que depende de la inversión extranjera con la que se financia el gobierno (la promesa de cero déficit presupuestal está basada en este supuesto), y que a cambio exige tener a su disposición mano de obra barata, el pago de pocas prestaciones sociales y bajo costo por despidos, condiciones que garantiza la recién aprobada reforma laboral.

Se trata de un modelo que en esas condiciones produce escaso crecimiento económico, poco empleo y precario, mucha informalidad y, desde luego, mayor desigualdad. De ahí que los cinco ejes del programa peñanietista estén condenados al fracaso. O en todo caso serán la cortina de humo con la que se tratará de distraer al respetable del verdadero proyecto de saqueo nacional que se pondrá en marcha con las reformas estructurales que faltan y que en el discurso de hoy se mencionaron apenas de soslayo. Por algo será.

Por otra parte, las 13 "decisiones" de gobierno anunciadas como iniciales constituyen el ejemplo más acabado de gatopardismo: la cruzada nacional contra el hambre, el programa de seguro de vida para jefas de familia y la pensión para mayores de 65 años confirman el enfoque asistencialista y demagógico que seguirá teniendo la llamada política social, porque no atiende las causas estructurales de los problemas que se dice querer combatir.

La reforma al artículo tercero constitucional para crear las bases del Servicio Profesional de Carrera Docente, de nuevo hace recaer sólo en los profesores la responsabilidad del desastre educativo, como si éste no consistiera en realidad en el control corporativo del sindicato a manos de Elba Esther Gordillo, en los ineficaces modelos educativos y en los propios contenidos light que se imparten.

Estará por verse el alcance del decreto anunciado con medidas de austeridad en el gasto público, la unificación de los códigos penales, la licitación de dos nuevas cadenas de televisión abierta y la propuesta de Ley de Responsabilidad Hacendaria para poner en orden la deuda de los gobiernos de los estados que, en principio, parece violar el régimen federalista y la autonomía de las entidades.

La privatización de Pemex (reforma energética), el aumento del IVA y su aplicación en alimentos y medicinas (reforma fiscal) y la de seguridad social se anunciarán después. Y sin embargo, se trata de las llamadas reformas estructurales que delinean el verdadero proyecto entreguista del priismo restaurado.

El no referirse a ellos con amplitud en la toma de posesión seguramente obedece a la necesidad de no levantar temprana oposición y rechazo y empañar lo que los antiguos priistas solían llamar la "luna de miel" del nuevo gobernante con sus gobernados. Sólo que esta vez ni eso tendrá.

viernes, 30 de noviembre de 2012

Calderón: Los saldos

El saldo rojo de Felipe Calderón al frente del poder en México no se refiere sólo a los 95 mil 632 asesinatos documentados por el INEGI entre 2007 y 2011, sino a los pobres registros en economía, empleo, educación y cultura.

Hablamos de una administración deficitaria en casi todos los rubros, como podrá verse en este recuento no exhaustivo, pero sí comprehensivo de este funesto periodo.

  • En cuanto a gasto social como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) México ocupa el último lugar entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). El promedio que estos países destinan a ese gasto es de 22 por ciento con un máximo de 30 por ciento en los casos de Francia y Dinamarca. Pese a los discursos aquí se aplica aproximadamente ocho por ciento, menos de la mitad del promedio de los países asociados al organismo.
  • Datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) indican que aumentó 30 por ciento el costo de la canasta básica por persona en los últimos cuatro años, en tanto que el ingreso sólo subió 1.7 por ciento.
  •  El propio Coneval informó que en el ámbito rural la canasta alimentaria subió 45 por ciento (de 492 a 702 pesos) entre enero de 2005 y junio de 2012. También que 40.5 por ciento de la población indígena de México sufre carencia de comida y la malnutrición en niños indígenas duplica el promedio nacional.
  • Datos de la Cepal y Unicef indican que la población indígerna del país es la más marginada de toda América Latina. De los 2.87 millones de menores, 22.8 por ciento carecen de educación formal; 88.7% no tiene acceso a vivienda digna y 67.5% están privados del derecho al agua potable. 
  • Entre el 1 de diciembre de 2006 y el 30 de junio de 2012 se crearon un millón 809 mil 211 empleos con seguridad social, cuando el 3 de mayo de 2006 el candidato Felipe Calderón ofreció un millón de empleos por año. Según el INEGI, la Población Económicamente Activa (PEA) aumentó en el periodo en cinco millones 143 mil 637 jóvenes para sumar 49 millones 590 mil 669 personas, lo que significa que sólo se creó una de cada tres plazas necesarias.
  • Esa misma proporción --uno de cada tres trabajadores-- subsiste en la economía informal. A junio de 2012 la población ocupada en este sector aumentó en 830 mil personas, con lo que el total de trabajadores en la economía subterránea llegó a 14 millones 200 mil personas. 
  •  Pese a los encendidos discursos de los últimos días en que Calderón inauguró varios tramos carreteros que según él hicieron del suyo "el sexenio de la infraestructura", la realidad es que, como en otros casos,  resultó más pirotecnia que efectividad. Con datos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, expuso que entre 2007 y 2011 se erogaron 264 mil 22 millones de pesos en infraestructura carretera. 
 Sin embargo, la competitividad internacional del sistema carretero nacional decayó: pasó del lugar 49 en 2006 al 55 en 2010, de acuerdo con el Foro Económico Mundial.

  • El sector primario de la economía (agricultura, ganadería y pesca) no creció en este sexenio. Su contribución al PIB nacional es de sólo cuatro por ciento, por debajo de lo que aporta en China y Brasil, según el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas. Al cierre de 2012 el sector tuvo una captación negativa de nueve mil 102 millones de pesos en impuestos. Esto se debe a que mediante diversos mecanismos fiscales (tasas diferenciadas de impuesto sobre la renta, exenciones, subsidios, créditos fiscales, condonaciones, estímulos, deducciones, tratamientos y regímenes especiales) se devolvió a las empresas del sector --principalmente trasnacionales-- 16 mil 757 millones de pesos.
  • Con Calderón, empresas extranjeras (la mayoría canadienses) duplicaron la extracción de oro en el país: pasó de 43.7 toneladas en 2007 a 87 toneladas en 2011. Un gran negocio de saqueo si se considera que la cotización de la onza de oro se incrementó de 700 dólares en 2007 a mil 851 dólares en julio de 2012, un aumento de 164 por ciento. Según la Cámara Minera Mexicana --cuya denominación de mexicana parece un chiste-- la canadiense Goldcorp Inc. es la mayor productora de oro en México.
  • Otro saqueo que se consolidó durante el calderonato fue el de divisas. De acuerdo con el Banco de México este sexenio sacaron del país 145 mil millones de dólares, cantidad que duplica el saldo actual de la deuda externa del gobierno y que representó un aumento de 266 por ciento respecto del gobierno de Fox.
  • La evasión fiscal también fue una fiesta. Según la Red para la Justificación Fiscal, un organismo internacional, mexicanos depositaron estos años 417 mil millones de dólares en paraísos fiscales que equivalen nada más y nada menos que a 40 por ciento del PIB.
  • Otra fuente de beneficios para las grandes empresas nacionales y trasnacionales fue la devolución que hizo el fisco de pagos por concepto de impuestos. Ascendieron a 174 mil millones de pesos principalmente a cementeras, mineras, automotrices, refresqueras, cerveceras, electrodomésticos, telefonicas y cigarreras.
  • Durante el sexenio, el gobierno gastó en importación de gasolinas 112 mil  569.2 millones de dólares, es decir 53 por ciento de los ingresos por exportación de crudo. En contraparte, sólo en 2011 se quedó sin ejercer 90 por ciento del presupuesto asignado para la construcción de la refinería Bicentenario, la cual permitiría abatir la compra de gasolina al exterior. El costo estimado de la refinería es de 11 mil 610 millones de dólares, casi un tercio de lo que se destina a la importación de productos refinados en un año.
  •  Otro ejemplo de la corrupción con que se manejó Pemex es el de su deuda. En 2006 ascendía a 569 mil millones de pesos. Con Calderón pagó casi la mitad de ese monto sólo en intereses (233 mil 796 millones de pesos), y sin embargo, en vez de deber menos, la deuda se incrementó: ahora es de 772 mil 100 millones de pesos.
  • Datos de la Secretaría de Hacienda revelan que al cierre de julio de 2012 la deuda pública gubnernamental alcanzó un máximo histórico: cinco billones 112 mil 236 millones de pesos. En 2007 representó 27.36 por ciento del PIB y en 2012 supera ya los 37.10 puntos porcentuales. Un crecimiento de casi 10 por ciento en el sexenio, según la dependencia.
  •  La deuda externa, que se redujo durante el foxiato, alcanzó con Calderón un máximo histórico al llegar a 204 mil 179.7 millones de dólares, que equivale a 19 por ciento del PIB (valor de bienes y servicios producidos en un año por la economía). Esto de acuerdo con datos del Banco de México, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y del Fondo Monetario Internacional citados en el anexo estadístico del VI Informe de Gobierno. 
  • La deuda externa total (de los sectores público, privado y bancario) creció entre 1990 y 2000 en 22. 67 por ciento, pero entre 2000 y junio de 2012 creció 65.52 por ciento, el triple que en la década precedente, pues pasó de 123 mil 350 millones de dólares en 2000 a 204 mil 179.7 millones de dólares, en 2012 (un aumento de 80 mil 829.7 millones de dólares más).
  •  Este volumen de endeudamiento ocurrió pese a que Pemex aportó 3.9 billones de pesos en impuestos al gobierno, según el Banco de México. Un incremento de 85.2 por ciento respecto del sexenio de Fox. Así, el calderonato recibió de Pemex el equivalente a 25.6 por ciento del PIB que asciende a 15.2 billones de pesos.
  • Según Banxico nunca ningún otro gobierno contó con tantos recursos de Pemex (un billón 825 mil 497 millones de pesos más que su antecesor).
  • Apenas 0.43 por ciento del PIB se destinó a ciencia y tecnología, según anexos del VI Informe de Gobierno. Ese porcentaje está por debajo del uno por ciento recomendado por los estándares internacionales. Corea del Sur destina a ese rubro 5% del PIB; Japón: 3.26%; EU: 2.90%; Alemania: 2.82%; Francia: 2.25%.
  • Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México es el único país miembro con más desempleo entre los más educados. Es último lugar en expectativa de graduación en bachillerato con 47%; penúltimo en tasa de graduación a nivel superior con 20%; pero es tercero en el número de ninis con siete millones 248 mil 400, es decir, 24.4% de la población entre 15 y 29 años.

martes, 27 de noviembre de 2012

¿Qué hizo posible a Calderón?


Fiel a su mesianismo o, si se prefiere, a su torcida involución psicológica que lo condujo de más en más a sentirse y verse como un elegido, Felipe Calderón explica su paso por la presidencia de México como un designio divino.

En efecto, la semana pasada formuló en su natal Michoacán la siguiente declaración de fe:

"Yo asumo que a uno le toca vivir el momento que le toca vivir por alguna razón, que Dios sabe por qué pone a determinadas personas frente a determinadas circunstancias".

Ya habrá tiempo de analizar qué tiene el pueblo de México que así ha llevado a la conducción del país en los últimos doce años, primero a un locuaz ignorante, después a un místico de la violencia y la crueldad como forma de redimir culpas históricas de la nacionalidad, y ahora a un iletrado sin más idea que el rollo neoliberal repetido mecánicamente por convenir a los intereses a los que sirve.

¿Qué hizo posible un gobierno como el de Calderón? No desde luego su explicación teológica. Algo más simple: el entramado de instituciones e intereses nacionales y extranjeros que conforman el grupo hegemónico en el poder.

Intereses mediáticos, económicos, financieros, políticos --incluidos los de la presunta izquierda-- y hasta criminales, organizados para ejercer su dominio mediante la exclusión sistemática de los grupos sociales dominados, de modo que éstos encuentren inaccesible e infranqueable la ruta hacia un cambio en las relaciones asimétricas de poder que prevalecen.

Del lado de la sociedad, lo que permitió está que seguramente pasará a los anales como una aberración histórica que viene a confirmar aquello de que el triunfo de la derecha es moralmente imposible, se explica por la existencia de una población poco educada, empobrecida, esencialmente conservadora y tímida; dominada por un sentido fatalista de la historia, que le dicata frases asumidas como verdades inmutables que hacen ociosa cualquier clase de resistencia: "contra el gobierno nada se puede", que recuerda aquella del famoso tango gardeliano: "Contra el destino nadie la talla".

Este conjunto de factores --perfectamente históricos-- ha hecho posible que en el México del siglo XXI se haya producido un "gobierno" como el de Calderón. Lo que sin embargo más llama la atención es la falta de respuesta social, la incapacidad para detener a una administración que bañó de sangre al país, que enlutó a miles de familias sumiéndolas en el más atroz de los sufrimientos por la pérdida, desmembramiento, tortura, levantamiento o asesinato --que todas esas variedades macabras se dieron-- de sus seres queridos.

La pasividad y permisividad de la sociedad ante la muerte o exterminio de sus semejantes es acaso el signo más preocupante de todo este asunto, pues conduce a pensar que si ni ante el peligro extremo se reacciona como forma mínima de autodefensa, no lo haremos ante nada.

Todo el aparato crítico desplegado, a la postre no resultó sino testimonial porque no alcanzó para detener la masacre de miles. Los mecanismos institucionales tampoco resultaron eficaces fundamentalmente por la traición del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

En efecto, ya desde 2009, en las elecciones legislativas intermedias la población derrotó en las urnas la malhadada y desorganizada estrategia bélica, al arrebatarle al Partido Acción Nacional (PAN) la mayoría en el Congreso para cedérsela al PRI.

Y sin embargo, este partido traicionó el mandato de las urnas, pues continuó autorizando cada año crecientes partidas presupuestales para una guerra dirigida más al exterminio y control social que al combate al crimen organizado, como puede corroborarse a la luz de los nulos resultados.

Como ha documentado Mayolo Medina, presidente de la Fundación para el Estudio de la Seguridad y la Gobernanza, en los últimos 11 años (2001-2011) el presupuesto de la Secretaría de Seguridad Pública federal aumentó 668.1 por ciento (de 5.2 a 40.5 mil millones de pesos).

De todo ello habrá que extraer las lecciones pertinentes y la más inmediata es encaminar la lucha política por la vía de la organización social al margen de las instituciones formales de representación que hoy se encuentran cooptadas y reguladas por los grupos hegemónicos que las utilizan para llevar a cabo los procesos de legitimación y canalización de sus propios intereses.

Y esto es clave porque sin ello la dominación política no duraría ni un día. De ahí tiene que partir un programa de organización política de la sociedad.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Petraeus: sexo, mentiras y correos


Una serie de emails enviados por una amante celosa a la persona equivocada provocaron la semana pasada la caída del jefe de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos, el laureado y reconocido general David Petraeus; comprometieron seriamente la carrera del general John Allen como comandante de las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán y de rebote, condujo a descubrir que el gobierno de Barack Obama mintió en el caso del ataque del 11 de septiembre contra el Consulado de EU en Bengasi, Libia, en el que murieron cuatro estadounidenses incluido el embajador Christopher Steven.

Petraeus y Broadwell

Cuando Paula Broadwell decidió amenazar por correo electrónico a Jill Kelley nunca imaginó que su infundado ataque de celos provocaría todo este escándalo en la política estadounidense.

Broadwell --una experta en contrainsurgencia que vive en Charlotte, Carolina del Norte con su esposo y dos hijos-- envió a Kelley emails intimidantes que incluían frases como "aléjate de mi hombre", en referencia al general Petraeus con quien la remitente sostenía una relación extramarital.

Kelley, de 37 años, era amiga del ahora ex jefe de la CIA a quien conoció cuando se desempeñaba como voluntaria de enlaces sociales en la base de la fuerza aérea de Mac Dill, sede del comando central de EU, donde Petraeus y Allen estuvieron comisionados entre 2008 y 2010. En ese papel, organizaba cenas, fiestas y ayudaba a los generales y sus familias a ambientarse en su nueva sede.

Patraeus conoció a Broadwell en 2006 y le ofreció ayuda para una investigación que la mujer planeaba realizar. En 2010 y 2011 Broadwell viajó en numerosas ocasiones a Afganistán  donde el general estaba al mando de las fuerzas de la OTAN, pues su proyecto consistía en una biografía del laureado militar. Dos meses después de ser nombrado jefe de la inteligencia estadounidense, en noviembre de 2011, Petraeus y su biógrafa iniciaron una relación amorosa.

La amistad y cercanía de Petraeus con Kelley hizo pensar erróneamente a Broadwell que su amante había comenzado una nueva aventura y decidió intervenir. Lo que no calculó es que la destinataria de sus amenazantes mensajes, asustada por el contenido de éstos, los mostraría a un amigo suyo de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), cuya pesquisa puso al descubierto los amoríos del jefe de la CIA, por lo que debió renunciar al cargo.

Al principio, la renuncia de Petraeus fue interpretada por la oposición republicana como un ardid para no presentarse a declarar ante los legisladores sobre el ataque del 11 de septiembre contra el Consulado estadounidense en Libia, episodio sobre el que había dudas acerca de si efectivamente se había tratado de una agresión espontánea de islamitas ofendidos por el contenido de una película contra el profeta Mahoma.

En esas estábamos cuando se supo que el affair Petraeus había alcanzado también al general John Allen, quien estaba a punto de ser confirmado como comandante de las fuerzas de la OTAN en Afganistán, y cuyo nombramiento fue congelado.
Jill Kelley
 Al parecer fue Allen quien sí tuvo flirteos con Jill Kelley (lo que confirma lo equivocada que estaba Broadwell). Una investigación del Pentágono reveló que mantuvo "comunicaciones inapropiadas" con la anfitriona de las fiestas a las que asistía junto con Petraeus.

Los correos electrónicos entre Allen y Kelley eran "inapropiados" por su carácter "insinuante", no porque incluyeran información sensible que implicara violaciones a los códigos de seguridad de la organización, señalaron fuentes del Pentágono.

Dado que sus correos fueron los que detonaron estos escándalos, el FBI registró el lunes pasado la casa de Paula Broadwell para cerciorárse de que Petraeus no hubiera compartido con ella información o material clasificado. No fue el caso. Pero esta incursión en correos de altos mandos reavivó el debate sobre la privacidad en Internet y la facultad de los gobiernos para espiar cuentas privadas de correo electrónico.

Chris Soghoian, miembro del Proyecto de Privacidad y Tecnología, de la American Civil Liberties Union, señaló que este caso "es un recordatorio de que la protección legal de los emails está muy por debajo de lo que debería".

Abrumado por los hechos y por una semana de escándalos, Petraeus compareció el viernes pasado ante los legisladores que investigan el ataque al Consulado de EU en Bengasi. Ante ellos, admitió que se trató de un acto de terrorismo en el que estuvo implicado el grupo Al Qaeda. Y pese a que sostuvo que había sido un ataque  espontáneo en respuesta a un film islamófobo, señaló que él se quedó con la impresión que desde el principio dejó en claro que había una participación terrorista significativa.

Ahora los republicanos acusan al gobierno de Obama de engañar a la gente para minimizar el hecho de que no pudo impedir un ataque terrorista, lo cual habría afectado sus posibilidades de reeleción el pasado 6 de noviembre.

Entretanto, puntuales seguidores de la máxima según la cual time is money, ejecutivos  de Hollywood ya preparan guiones para una película sobre estos escándalos al interior de la CIA. Lo que no está claro es si alguno de los protagonistas de esta historia --ya sea Petraeus o Broadwell-- venderán los derechos de su relación, que tiene todos los visos de convertirse en un éxito de taquilla.

Y todo por unos correos equivocados... 

(Con información de La Jornada y Agencias).

jueves, 15 de noviembre de 2012

Comisión Nacional Anticorrupción

Circunspectos, protocolarios, con ademanes y gestos graves, como si de verdad se tratara de personalidades honorables que estuvieran haciendo un gran servicio a la patria, la dupla de priistas que controlan el Congreso --Emilio Gamboa Patrón y Manlio Fabio Beltrones-- recibieron ayer de Enrique Peña Nieto y sus hombres --Luis Videgaray y Miguel Ángel Osorio Chong-- las iniciativas de reforma administrativa y anticorrupción.

Usuarios de redes sociales, donde puede afirmarse que está el pulso de la sociedad medianamente informada y crítica, han puesto ya en entredicho y con la sorna que amerita el caso, los alcances de la propuesta Comisión Nacional Anticorrupción, destacando la paradoja de que sean los priistas, arquetipo de las prácticas corruptas, quienes anuncien un órgano encargado de combatirlas.

Se trata, dijo Enrique Peña Nieto, de un órgano "estrictamente imparcial y profesional", lo que no dijo es que será "estrictamente autónomo" porque no es el caso. Se integrará con cinco comisionados elegidos por el presidente de la República, a quien, como se estila, deberán lealtad a partir de que le deben el cargo.

Lo notable del caso es la desfachatez con que se anuncia un esfuerzo que, incluidos sus propios promoventes, todos saben condenado al fracaso, porque, si acaso, la corrupción que se combatirá será la de ventanilla, pero quedará intocada aquella que se practica mediante el tráfico de influencias que tiene lugar en las altas. Allí donde las relaciones políticas  y la influencia de los poderes fácticos se traducen en jugosas concesiones o negocios, pues como reconoció hace unos días Ricardo Salinas Pliego, de TV Azteca:  las grandes empresas "como la mía podemos contratar muchos abogados, contadores y muchos cabilderos" para sobrevivir...".

Esos cabilderos y el derecho de picaporte que ejercen los grandes capitanes de empresa en los despachos gubernamentales clave, son la llave maestra que permite destrabar a discresión asuntos de interés económico que no siempre coinciden con los de la patria y sobre los que la nueva Comisión no tendrá ojos, como no los tuvieron antes la Contraloría General de la Federación, de Miguel de la Madrid, ni la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam) de Ernesto Zedillo, ni la Secretaría de la Función Pública, encargada de disimular las corruptelas del panismo.

En ese contexto, las señales de simulación con que inicia un gobierno emanado de un proceso electoral manchado por las evidencias de corrupción, no pueden sino considerarse ominosas.







   

martes, 13 de noviembre de 2012

Deuda externa y Pemex privatizado


La economía mexicana podría estar, como en 1994 previo al error de diciembre, prendida con alfileres. Y es que el endeudamiento públicó sobrepasó ya los cinco billones de pesos (cinco billones 536 mil 650.2  millones de pesos en números exactos), lo cual representa 42.3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo con el presidente de la Comisión de Energía y secretario de la Comisión de Hacienda del Senado, el priista David Penchyna.

Los focos rojos en este tema están encendidos, pues según recomendaciones del gurú de nuestros financieros, el Fondo Monetario Internacional, la deuda pública de los países emergentes --como México-- debe mantenerse en un rango de entre 25 y 30 por ciento del PIB, el cual fue superado desde el patriótico 2010 por la administración calderonista en 12.3 puntos porcentuales.

En este como en otros temas el fariseísmo panista está más que a la vista: además de la cruenta guerra que ensangrentó al país y dejó a miles de familias sumidas en el dolor, el asunto de la escandalosa corrupción impune durante el foxiato y el calderonismo, es el otro gran tema de estos años. Críticos de los sexenios priistas y de los países europeos que se endeudaron irresponsablemente, el panismo dejará al país con la mayor deuda externa de toda su historia: es decir, debemos casi la mitad de toda la riqueza que producimos entre todos en un año.

A propósito de los saldos de la guerra, el cambio de percepción mostrado por Felipe Calderón a 17 días de entregar la presidencia, sobre cómo combatir al narcotráfico no es más que la confirmación de que todo fue una estretagia planeada para mantener el país en estado de shock (véase la teoría de Naomi Klein) como una forma de control social y para mantener apuntalada con la fuerza de las armas una presidencia tan precaria por su défict de legitimidad, que incluso se auguraba que no completaría el tramo sexenal.


Ahora que se marcha y ya no es necesario mantener la impostura, el michoacano hasta se permite formar un frente común con los presidentes de Honduras, Costa Rica y Belice para demandar a la Organización de Estados Americanos que analice el "cambio de paradigma" y revise "el enfoque mantenido hasta ahora por la comunidad internacional en materia de drogas". Ya lo dijo Sabina: "¡a buena hora, carajo!"

Quienes siguen en el mismo paradigma de crear membrete tras membrete como forma de "lucha" contra el neoliberalismo avasallante son nuestros ínclitos líderes laborales y de organizaciones gremiales de "izquierda". El pasado viernes crearon el llamado Frente Amplio Social con el que pretenden oponerse a la reforma a Ley Federal del Trabajo.

Mídase la eficacia que podrán tener con sólo leer las declaraciones de estos lídercillos, las cuales reflejan no sólo candor, sino ignorancia del carácter del enemigo que dicen enfrentar. La Unión Nacional de Trabajadores (UNT) criticó al PAN pues en el affair de la reforma laboral "vio por sus intereses políticos y partidistas y no por los trabajadores". ¿En verdad la UNT esperaba otra cosa? ¿conocen estos jilguerillos la historia política del país? ¿con ese bajage esperan constituir un frente opositor?

Todavía más: Ricardo del Valle, líder de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación  (ASSA) dijo que la actuación del PAN en ese episodio fue "desconcertante". Con estos líderes que así se dicen sorprendidos por un partido que históricamente ha sido contrario a las luchas sociales, tenemos para saber que con esos amigos...

Con ese tipo de opositores se entiende el optimismo del coordinador de los diputados priistas, el sonorense Manlio Fabio Beltrones, quien este lunes anunció que el camino de las reformas ya se ha abierto y el Congreso seguirá con la reforma hacendaria, la energética y la social.


Y vaya que si van por todo, pues sin rubor alguno el presidente de la multinacional española Repsol, Antonio Brufau ha dicho que ante la perspectiva de privatización de la industria petrolera "México está en el radar de todas las compañías internacionales para aportar valor a esas compañías". Y como queriendo matizar un poco la ambición sobre el apetitoso botín que ya saborean completó: "...pero sobre todo, para aportar valor por encima de todo a México".

Aunque ya antes el consultor privado y ex funcionario de Pemex, Marcos Giacomán había advertido que no se conformarán con una reforma light. Eso no debe aceptarse --amenazó-- tenemos que ir por todas las canicas y plantear una reforma constitucional que establezca las distintas modalidades de explotación de los recursos petroleros con participación del capital privado. Así las cosas.


jueves, 4 de octubre de 2012

¿Por qué ESTA reforma laboral?

La reforma laboral que se procesa actualmente en el poder legislativo en México responde, en último término, al designio que desde hace por lo menos 25 años rige en el mundo: suprimir el Estado de bienestar, cuyo modelo de economía mixta facultaba al Estado a mediar entre los factores de la producción para garantizar el bienestar material de la población en general.

La idea subyacente en esa supresión es la de mantener los márgenes de rentabilidad no ya mediante la producción y el trabajo sino vía la expansión del sector financiero desregulado, cuyas prácticas especulativas con las deudas soberanas de los países --véanse los casos de Grecia, España, Italia, Portugal-- les reditúan mayores ganancias que la producción de mercancías y la creación de empleos.

De ahí que en México y el mundo las tasas de desempleo se encuentren al alza. En un artículodel blog Democracy in America, de The Economist (When the workers aren't needed) se señala que en EUA la porción laboral de los ingresos nacionales ha ido a la baja desde 1970 y la tendencia sólo ha conseguido empeorar desde la pasada crisis financiera.

Como lo señala ese artículo, los trabajadores están dejando de ser necesarios y aquellos que necesiten integrarse a la actividad económica deberán aceptar las condiciones del mercado expresadas en leyes laborales como la que está en curso en México.

Ello porque actualmente la valorización del capital --lo que da valor e incrementa la rentabilidad y ganancias del dinero-- se basa en la contracción del trabajo asalariado, en la restricción al consumo, la inversión especulativa y la desregulación estatal.

Esta nueva forma de valorizar el capital requiere de nuevas leyes que dén legitimidad a las prácticas socio-económicas y laborales que deben imponerse (como el outsourcing, la flexibilidad, los contratos de prueba, por ejemplo) y para eso está el aparato estatal (el ejecutivo, el legislativo y el judicial): para adaptar legalmente y dar legitimidad a las condiciones que requieran las relaciones de dominación imperantes.

No en balde, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) dice que la reforma laboral termina con la simulación y la ilegalidad. En efecto, pero lo hace no corrigiendo las violaciones sino legalizándolas. Con esa lógica mañana podría legalizarse, por ejemplo, el robo en propiedad ajena. Como se trata de algo que existe, pero que la ley prohíbe, configura lo que el CCE denomina una simulación con la que sería preciso terminar.

Así, las reformas estructurales --como la laboral-- no son otra cosa que el intento por darle al capital un andamiaje jurídico y legal que favorezca la acumulación de mayores ganancias por la vía de la supresión de los derechos económicos de los trabajadores o disminuyendo o eliminando prestaciones sociales.

La lógica de fondo es que las mayores ganancias ya no están en la producción de bienes, sino en la inversión financiera especulativa en ramas específicas. Por eso ya nadie crea empleos y por ello vendrá también la reforma energética, pues Pemex es otra jugosa veta que urge abrir a la inversión privada, nacional y extranjera, ávida de las millonarias ganancias que reporta el sector.
  


lunes, 24 de septiembre de 2012

"Acordaos de los atenienses"

Cuenta el maestro Justo Sierra, en "Las guerras heleno-pérsicas", que hacia el año 490 a. de C., el rey persa Darios enfrentó la insurrección de Miletos y otras ciudades ionias, a consecuencia de un conflicto entre el tirano Aristágoras y uno de los sátrapas.

A ruegos de Aristágoras, los atenienses tomaron parte en los comienzos de esa insurrección y en el incendio de Sardes, la capital occidental del imperio persa. Muy pronto los de Atenas abandonaron esa guerra, pero Darios no les perdonó el ultraje.

Sofocada la revuelta, el rey persa decidió enviar sus escuadras a castigar a los atenienses. Pero ocupado en las múltiples tareas del imperio que demandaban su atención, dio a uno de sus domésticos el encargo de repetirle a cada instante: "señor, acordaos de los atenienses".

Aunque sin el ánimo de venganza que insuflaba al rey Persa, pero sí como una forma de conciencia colectiva que guíe nuestra actuación como ciudadanos, los mexicanos de esta hora deberíamos --en medio del trajín cotidiano por la sobrevivencia y a falta de un sirviente que lo haga-- repetirnos de cuando en cuando: "Acordaos de cómo fue 'elegido' Enrique Peña". 

martes, 11 de septiembre de 2012

El gesticulador hoy



Es difícil encontrar una metáfora más a propósito para la hora actual que la pieza teatral El gesticulador, escrita por Rodolfo Usigli en 1937 y estrenada en Bellas Artes 10 años después, el 17 de mayo de 1947.

La anécdota es conocida:

César Rubio –un maestro universitario poco valorado, a pesar de su profundo conocimiento de la revolución mexicana-- se muda con su familia al norte de México.

Desde el principio asistimos al drama de una familia que rumia su pobreza y culpa al padre de sus propios fracasos, pues Miguel (el hijo) es un estudiante mediocre que nunca consiguió nada en la universidad y Julia (la hija), una joven que se considera fea e incapaz por ello de retener el amor de su vida.

Se trata de una familia enfrentada, inconforme consigo misma, en la que el juicio de los hijos sobre el padre es lapidario, pero incapaces ellos mismos de superar su propia mediocridad.

La vida de todos da un vuelco con la súbita presencia de un investigador estadounidense apasionado por la historia de México, quien busca datos que lo conduzcan a resolver la incógnita de la repentina y misteriosa desaparición del más importante precursor de la revolución mexicana, ocurrida en 1914, y de quien nunca más se supo nada: el gran revolucionario César Rubio.

La homonimia y el puntual conocimiento que tiene de esos episodios, hacen concebir al maestro César Rubio la idea de hacerse pasar por el héroe revolucionario desaparecido. Tentado por la idea y por los miles de dólares que la empresa le reportaría, hace creer al investigador universitario que él es el personaje que busca y que le cederá las pruebas necesarias a condición de que nunca revele el hallazgo.

El investigador no resiste la tentación, rompe el pacto y publica la historia. En México la revelación de la existencia del famoso revolucionario que pasó cerca de 24 años oculto bajo la fachada de un insignificante profesor universitario, provoca una conmoción política.

Por orden presidencial el líder del Partido Revolucionario de la Nación, el presidente municipal y los diputados federales visitan a César Rubio y tras pedirle pruebas de su identidad, le ofrecen competir por la candidatura a gobernador del estado, pues el actual precandidato sólo favorece a un grupo reducido de políticos y excluye al resto de los beneficios de ser gobierno.

La esposa, que está al tanto de la mentira, se opone y pide a César que decline el ofrecimiento, pero éste permite que la farsa continúe y acepta competir por la candidatura. Navarro, el otro precandidato del Partido, enfrenta a César Rubio, le hace saber que conoce la mentira porque él mismo se encargó de asesinar al verdadero revolucionario.

Le exige que se retire de la contienda o quedará exhibido. Rubio se niega y lo amenaza a su vez con denunciar su crimen.

Rubio acude al plebiscito del que, debido a su popularidad, todos suponen que saldrá ungido como el candidato oficial al gobierno de la entidad. Sin embargo, un sicario contratado por Navarro lo asesina al llegar al lugar de la elección. El victimario es, a su vez, muerto por los hombres de Navarro y presentado como un “fanático católico” por los crucifijos y escapularios que le habían hecho colgarse sus contratantes.

Al enterarse, la familia queda destrozada y, aunque todos saben que Navarro es quien ordenó el homicidio, se convierte en el candidato sustituto que de inmediato se gana el apoyo del pueblo, mediante el hipócrita expediente de honrar la memoria del político que mandó asesinar.

Si bien el conflicto de valores humanos está presente en toda la trama, lo que aparece como telón de fondo determinando y empujando esa transgresión ética es el naciente sistema político mexicano que hacia la tercera década del siglo XX había ya tergiversado los ideales revolucionarios.

No es casual que la acción se escenifique en un estado del norte del país. Recuérdese que finalmente la revolución fue ganada por el grupo Sonora, a la cabeza del cual figuraban los generales Plutarco Elías Calles y Álvaro Obregón. De hecho, el asesinato de César Rubio, atribuido a la acción de un “fanático católico”, recuerda el asesinato de Obregón en el restaurante La bombilla, en San Ángel.

En este caso, José León Toral, catalogado de inmediato como fanático religioso, también fue ultimado en el lugar de su magnicidio, el cual, por cierto, impidió que se consumara la primera traición de los sonorenses al espíritu de la revolución y a la letra de la Constitución que impedía la reelección presidencial que se hubiera consumado si Obregón no muere en ese atentado.

Pero más allá de esa alusión histórica, lo que El gesticulador pone de manifiesto es la forma como los ideales revolucionarios (en la pieza teatral representados por el revolucionario César Rubio) fueron posteriormente encarnados y adulterados por impostores (el maestro César Rubio), quizá en ocasiones involuntarios, pero dispuestos a medrar con los anhelos populares en cuanto se presentara la oportunidad.

Y ello merced a un complejo, pero sutil mecanismo político que aseguraba impunidad y hasta honores a cambio de complicidades silenciosas. En un país en el que la cultura no paga –el maestro César Rubio cobraba cuatro pesos por sus clases en la universidad—el camino más rápido de ascenso en la pirámide social es la política.

Y ésta se encuentra ya tan corrompida que el sendero hacia la prosperidad económica encuentra los atajos del chantaje. De ahí que el profesor Rubio piense utilizar lo que sabe de los políticos locales para hacerse de algún hueso en el gobierno.

La posterior suplantación del héroe revolucionario le parece a César Rubio casi un acto de justicia inmanente: total, razona, “todo el mundo vive aquí de apariencias, de gestos…Y ellos sí hacen daño y viven de su mentira. Yo soy mejor que muchos de ellos. ¿Por qué no…?”.

Esa postura tomará carta de naturalización mediante la justificación instantánea de riquezas inexplicables con cargo al eufemismo aquel de “hacerle a uno justicia la Revolución” y que más tarde daría paso al cinismo conceptual que encriptaba la corrupción en la frase “vivir fuera del presupuesto es vivir en el error”.

Usigli es un perspicaz observador de los resortes que mueven la política de la época en la que escribe y la vigencia de su obra, se debe a que esos mecanismos persistirán afinados y renovados a lo largo de las siguientes décadas, a saber:

a)      El atropello y la adecuación de la ley a las necesidades no del país sino de las ambiciones políticas personales y las necesidades coyunturales del grupo gobernante:

En este sentido, César Rubio hace notar a los políticos que insisten en postularlo que existe un impedimento legal: la constitución prescribe que el elegido deberá acreditar una residencia de por lo menos un año en el estado y él acaba de llegar.

Lo que sigue es la más pura manifestación de la picarezca política del sistema:

--Estrella (presidente del Partido): Los gobiernos no pueden regirse por leyes de carácter general sin excepción…Deje usted al partido encargarse de legalizar la situación.

Además --dice el personaje, en lo que constituye una perla del contorsionismo político-- no se trata de transgredir la ley sino de "legalizar una situación".
 
b)      Nadie puede ir a contracorriente de las creencias populares. Fijada una idea en el manipulable imaginario colectivo, sin importar lo falsa que sea, adquiere rango de verdad incontrovertible (Confróntese con el caso actual de las encuestas).

Cuando Navarro amenaza con desenmascararlo ante la gente, César Rubio le grita:

“¡Imbécil! No puedes luchar contra una creencia general. Para todo el Norte soy César Rubio…Anda y denúnciame. Anda y cuéntale al indio que la virgen de Guadalupe es una invención de la política española. Verás qué te dice. Soy el único César Rubio porque la gente lo quiere, lo cree así”.

c)      La simulación que convierte a quienes traicionan los anhelos populares y a los criminales en héroes nacionales.

Navarro, por ejemplo, fue hecho coronel por haber asesinado al revolucionario César Rubio, como sale a relucir en la discusión que sostiene con el maestro que ha tomado el lugar de aquél. Para rematar, éste le dice:

“¿Quién es cada uno en México? Dondequiera encuentras impostores, simuladores; asesinos disfrazados de héroes, burgueses disfrazados de líderes; ladrones disfrazados de diputados, caciques disfrazados de demócratas, charlatanes disfrazados de licenciados, demagogos disfrazados de hombres. ¿Quién les pide cuentas? Todos son unos gesticuladores hipócritas”.

Al final lo que queda claro es, en efecto, la impostura de todos: el sistema mandó asesinar al verdadero César Rubio; cuando reaparece, intenta incorporarlo de inmediato a la esfera del poder; el maestro –justificado a sí mismo porque todos son impostores, se acoge al simulacro; cuando es asesinado por los sicarios de Navarro, éste asume la candidatura y gana el reconocimiento popular al honrar la memoria del héroe caído.

La historia así, recomienza una y otra vez: los traicionados y repudiados de ayer, serán los héroes de mañana, entronizados, en una cruel paradoja, por quienes los asesinaron, pero a quienes sirven hoy como fetiches, pues, como dice Navarro al joven Miguel: “México necesita de sus héroes para vivir”.

Sin importar que en ese panteón de próceres haya de todo: impostores, simuladores, gesticuladores.

El diálogo entre Navarro y Miguel con que concluye la obra es la rúbrica que muestra como en este país nadie podrá probar nunca un crimen político, un acto de corrupción, una traición al pueblo...un fraude electoral, porque todos, tarde o temprano, se convierten en cómplices y, por tanto, en rehenes del sistema.

Eso es lo que Usigli describe con maestría en su obra. De ahí su vigencia.